Las obras de construcción de una gran balsa de agua para aprovechar el líquido de las depuradoras de Consell y Alaró se han adelantado respecto a las previsiones iniciales. En principio no debían entrar en funcionamiento antes de finalizar el año. Sin embargo, Andreu Isern, alcalde de Consell, sostiene que "existe la posibilidad de que en junio pueda comenzar a dar caudal a algunos usuarios".

El Govern balear es el promotor de las obras que está ejecutando la empresa Tragsa.

La balsa en construcción tendrá una capacidad de 59.980 metros cúbicos.

En un principio se preveía que diese servicio a 18 parcelas agrícolas de los términos municipales de Consell y Alaró. En la actualidad se baraja la posibilidad de ampliar el número de usuarios. Fuentes próximas sostienen que "mientras no haya ampliaciones del proyecto se atenderán todas las peticiones posibles". Andreu Isern apunta que fácilmente se podría llegar a suministrar riego para 150 hectáreas". Esto supone un ligero aumento ya que la construcción de esta balsa tenía por objetivo sustituir el uso de aguas subterráneas por aguas depuradas para el riego de una superficie de 145 hectáreas.

El proyecto se denomina Aprovechamiento para regadío de las aguas regeneradas de las depuradoras de Consell y Alaró . Isern explica que "no tiene por que suponer la creación de nuevas explotaciones de regadío, que podría darse el caso, pero lo más importante es evitar la actual sobreexplotación del acuífero".

El proyecto se complementa con la construcción de un equipo de regeneración de las aguas secundarias procedentes de las depuradoras de Consell y Alaró y con la instalación de una red de distribución, de 4.200 metros de cañería de alta densidad, y de un equipo de bombeo para impulsar el agua hacia la balsa, que se ubicará en una nave de nueva construcción.

Descripción técnica

El proyecto también prevé un sistema de desinfección del agua filtrada mediante un equipo de cloración y tamices, así como la instalación de 18 bocas para las parcelas de los regantes, equipadas con una caseta de protección, electroválvulas y reguladores de presión. Los cultivos incluidos dentro de la comunidad de regantes son predominantemente extensivos, como por ejemplo cereales, forrajes y alfalfa, destinados a la alimentación animal, como también cultivos leñosos de almendros, olivos y algunas parcelas de viña.

Los terrenos donde se ubica la nueva balsa, de 46.500 metros cuadrados, fueron adquiridos en 2009 por el Govern de les Illes Balears por un importe de 300.000 euros.

El conjunto del proyecto supone una inversión de 4.519.231 euros, que aporta íntegramente la Comunidad autónoma.