El toro de Osborne, situado en la carretera de Manacor, entre Algaida y Montuïri, vuelve a mudar la piel. El único símbolo de este tipo que existe en las carreteras de Balears aparece ahora apoyando la manifestación de los indignados programada para el domingo, día 19.

Pero el toro ya ha sido portador de otros mensajes. Todo empezó el 12 de abril, cuando la figura se convirtió en un defensor la homosexualidad. Con los colores de la bandera gay amaneció este símbolo español. Después, volvió a su color inicial, el riguroso negro.

En mayo, alguien le dibujo unas flores en su lomo anunciando la primavera, de nuevo lo pintaron del color del luto. Pero el toro, que parece un ser rebelde, amaneció otro día con un traje de prisionero, criticando al expresident del Govern, Jaume Matas.

La última noticia que se recibió del toro fue unos días después de las elecciones, cuando alguien decidió poner un mensaje sobre este animal que mandaba a Francesc Antich "pa casa" junto a las siglas del Partido Popular.