"Hay que hacer algo a favor del futuro del Real Club Náutico de Palma y hay que hacerlo ya"

El director y gerente del histórico club palmesano, Manu Fraga, conmina a las administraciones públicas de Baleares a que actúen con urgencia para que la Ley de Puertos del Estado tenga en cuenta la singularidad de los clubes náuticos tras la caída del Náutico de Ibiza

El Real Club Náutico de Palma inicia hoy en la feria náutica una campaña de recogida de firmas solicitando el compromiso social con la ampliación de la concesión de la institución, actualmente en precario

FOTOS: Manifestación para salvar al Real Club Náutico de Palma

FOTOS: Manifestación para salvar al Real Club Náutico de Palma / Redacción Digital

Miguel Vicens

Miguel Vicens

Manu Fraga, gerente del Real Club Náutico de Palma, conminó ayer a las administraciones de Baleares y a sus representantes políticos que se han pronunciado a favor del futuro del club, actualmente en precario, que pasen de las palabras a los hechos. "Hay que hacer algo a favor del futuro del Real Club Náutico de Palma y hay que hacerlo ya. Es urgente", manifestó.

El llamamiento del Real Club Náutico de Palma llega una semana después de que la Autoridad Portuaria de Baleares acabara con el futuro del Club Náutico de Ibiza,, con 99 años de trayectoria, al otorgarle su concesión a la empresa  empresa Puertos y Litorales Sostenibles pese a su historia, arraigo social y reconocimientos.

"La Ley de Puertos del Estado no refleja la singularidad de los clubes náuticos , que son catalizadores del deporte y el ocio y no puede ser equiparados con las marinas privadas porque cumplen una función social de la que estas carecen", subraya Manu Fraga. "Pero es necesarios que las autoridades se pongan en marcha ya para que esta singularidad se reconozca, no basta presentar una proposición no de ley en el Parlament en favor de los clubes náuticos y después no hacer nada para que la Ley de Puertos cambie", enfatizó.

"Es necesario acelerar ese cambio para proteger la singularidad de los clubes. Y lo que le ha ocurrido al Club Náutico de Ibiza nos genera mucha preocupación y nos quita el sueño. Y como Real Club Náutico de Palma les apoyaremos en todo lo que podamos", aseguró Manu Fraga. "Porque ahora mismo hay dos varas de medir, la que representan los puertos autonómicos, con un reconocimiento de la náutica social. Y los clubes que dependen de los puertos del Estado, como el Real Club Náutico de Palma, en los que se nos equipara con marinas privadas de grandes yates sin tener en cuanta nuestra función social y deportiva", diferencia.

"En este momento el futuro del Real Club Náutico de Palma depende de este cambio legislativo, por una parte, o de la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Baleares sobre la naturaleza de su concesión", aclara.

"Si la justicia avala nuestra postura, podremos negociar con la Autoridad Portuaria de Baleares la prórroga de la concesión cuyo derecho se nos negó en 2021. Por el contrario -indica-, si la resolución judicial es desfavorable nos veremos abocados a la solicitud de una nueva autorización de ocupación temporal y previsiblemente a un concurso público, en una situación de inferioridad si no hay un cambio en la Ley de Puertos del Estado".

Recogida de firmas en defensa del futuro del Real Club Náutico de Palma

Por este motivo el Real Club Náutico de Palma pone en marcha hoy, en el marco de la feria náutica, Palma Boat Show, una campaña de recogida de firmas en defensa de la prórroga de su actual concesión. La firma del manifiesto implica la adhesión a la solicitud para que el RCNP pueda ver prorrogada su vigente concesión mientras los poderes públicos adoptan las medidas legislativas necesarias a las que se han comprometido para garantizar la supervivencia del modelo de gestión de los clubes náuticos.

El Real Club Náutico de Palma solicitó en 2015 una ampliación del plazo de su concesión para poder seguir desarrollando su actividad deportiva y social en las instalaciones que ocupa desde 1948, año de la fusión del Real Club de Regatas (1891) y el Club España (1916). El asunto está pendiente de una sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Baleares, que se prevé que se pronuncie en un plazo no superior a cuatro meses, estima Manu Fraga, gerente del histórico club que preside Rafael Gil desde el pasado 27 de octubre.

El Parlament aprobó hace dos meses una proposición no de ley instando al Ministerio de Transportes a promover de manera urgente la modificación de la Ley de Puertos del Estado para la protección de los clubes náuticos frente a la creciente especulación portuaria. En los últimos tres lustros han perdido su concesión los clubes de Maó, el Molinar e Ibiza, y sus concesiones han sido ocupadas por sociedades mercantiles sin experiencia en el fomento del deporte.