Los vecinos desalojados por el derrumbe de la calle Polvorín no podrán volver a sus casas "hasta nueva orden"

Un informe del Ayuntamiento de Palma prohíbe el uso de tres edificios cercanos a la vivienda siniestrada por "la peligrosidad que generan las fachadas inestables"

Cort ha realojado a 25 afectados en un hostal y centros municipales, mientras que otros se han ido a casas de familiares

Policía y personal de emergencias ante la vivienda siniestrada.

Policía y personal de emergencias ante la vivienda siniestrada. / Manu Mielniezuk

Jaume Bauzà

Jaume Bauzà

Los vecinos más próximos a la vivienda que sufrió un derrumbe en la calle Polvorín no podrán volver a sus casas "hasta nueva orden". Un informe del Ayuntamiento de Palma fechado este miércoles ordena a los afectados la "prohibición del uso de su edificio hasta nueva orden por razones de seguridad de los inmuebles y las personas".

El documento refleja que la vivienda siniestrada el pasado lunes, ubicada en el número 7 de la calle Polvorín, en el barrio de El Terreno, sufrió severos daños. "Se ha hundido la totalidad de los forjados y la cubierta, quedando las fachadas con la base desplazada hacia el interior y la parte superior abierta hacia fuera, generando una inestabilidad cercana al colapso".

De este modo, concluye que tres edificios cercanos ubicados en los los números 5 y 9 de Polvorín, y en el 94 de Robert Graves, corren riesgo de verse afectados. "Visto el estado en el que ha quedado el edificio hundido y la peligrosidad que generan las fachadas inestables con la posibilidad de que su hundimiento pueda afectar a los edificios vecinos, el técnico que suscribe considera apropiado prohibir el uso del edificio afectado y de los edificios vecinos hasta la estabilización o demolición de las fachadas", detalla el informe.

No se descartan "otras patologías no observables a simple vista"

El escrito, que también prohíbe el uso del inmueble derrumbado, no descarta asimismo que puedan existir "otras patologías o vicios ocultos, no observables a simple vista y por tanto no detectadas en esta visita de inspección ocular".

El derrumbe se saldó sin víctimas. La casa, un edificio antiguo de dos plantas, estaba siendo sometida a unas obras de reforma que empezaron el mismo día del siniestro.

Los los vecinos afectados residen en 31 viviendas repartidas entre los tres edificios colindantes. Un total de 25 de ellos han sido alojados por el Ayuntamiento en un hostal y centros de acogida municipales, mientras que otros se marcharon con familiares o amigos. Por ahora no hay fecha para saber cuándo podrán volver a sus casas.