Medio millar de niños entregan sus cartas a los pajes reales en Palma

Los emisarios de Melchor, Gaspar y Baltasar han leído los escritos de parte de Sus Majestades

La celebración ha comenzado con la actuación musical de Maria Bimbolles

Irene R. Aguado

Irene R. Aguado

Los Reyes de Oriente no llegan a Palma hasta el viernes por la tarde, pero sus pajes han abierto ya la recepción de cartas en la plaza de Cort para las familias más fieles a esta tradición. Entre 500 y 600 niños han hecho cola esta mañana frente al Ayuntamiento de Palma para entregar sus deseos a los emisarios de Sus Majestades, que a su vez han llegado a la plaza acompañados de sus respectivas comitivas. Entre la multitud se ha podido ver incluso a la presidenta del Govern, Marga Prohens, con su marido y segundo teniente de alcalde en el Ayuntamiento, Javi Bonet, y la hija que tienen en común, Blanca.

La celebración ha empezado con la animación musical de Maria Bimbolles, que ha interpretado canciones de su repertorio relacionadas con los Reyes Magos. Más tarde, los mensajeros reales han leído unas palabras de parte de los monarcas, prometiendo ser generosos con los que se han portado bien. Los ha recibido el alcalde de Palma, Jaime Martínez, y la regidora de Participación Ciudadana, Lourdes Roca, que en palabras a los medios de comunicación ha asegurado que para el Consistorio es "un honor" que los emisarios reales hayan pasado por Palma.

La responsable también ha avisado de que la Cabalgata continuará adelante el viernes aunque llueva: "Animamos a las familias a que vengan, si hace falta con paraguas", ha comentado. Mientras tanto, a sus espaldas, centenares de niños esperaban con ilusión y con la carta preparada en las manos. Marina Salom, de ocho años, ha sido una de las primeras en dejar su carta en el cofre de los pajes: "Siempre pido un solo regalo, este año unos juguetes de animales, pero después me encuentro muchas más cosas en el árbol", ha explicado. "Mi rey preferido es Baltasar", ha confesado después.

Todos han podido subir al escenario a entregar personalmente su carta a los pajes. A su vez, los mensajeros ofrecían abrazos y palabras de cariño de parte de Sus Majestades, pero también advertían: "Hay que portarse bien estos dos días antes de que lleguen".