El solar de la calle Rodríguez Arias que ahora los vecinos reclaman para que se convierta en un equipamiento fue escenario de la mayor tragedia ocasionada en Palma en los últimos años cuando, el 26 de octubre de 2009, se desplomó medio inmueble de tres alturas que ocupaba sin causas aparentes, causando siete muertos que aparecieron sepultados bajo los escombros y varios heridos.