El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Palma ha exigido esta mañana la retirada de la ordenanza de terrazas y que, en consecuencia, el texto inicial aprobado por el tripartito de Cort no se lleve al pleno del próximo mes de abril, tal como se ha anunciado, y que se siga negociando con los grupos de la oposición, vecinos y comerciantes para alcanzar el consenso.

La portavoz de este grupo municipal, Margalida Durán, acompañada del concejal Javier Bonet, han explicado esta mañana que van a presentar una enmienda a la totalidad por varios motivos. En primer lugar, porque consideran que el texto presentado por el tripartito "crea más problemas que los que soluciona". Según Durán, "la ordenanza actual es buena, porque ha posibilitado una ciudad abierta y dinámica, así como la creación de puestos de trabajo", aunque ha reconocido que "se han provocado problemas por el desinterés en hacerla cumplir".

Otros motivos para la presentación de la enmienda a la totalidad consiste en que "desregula la venta ambulante ilegal" y porque "el consenso que el equipo de gobierno dice haber alcanzado no es más que un paripé, ya que no están de acuerdo ni los vecinos, ni los comerciantes ni los restauradores".

Asimismo, afirman que, si se aplica tal como se ha aprobado el proyecto, se van a suprimir "numerosas terrazas" y, con ellas, "eliminar muchos puestos de trabajo".

Por su parte, el concejal Bonet ha explicado las seis enmiendas parciales que van a presentar al texto con el fin de mejorarlo sin finalmente no se admite su retirada.