El consejo de administración de Palau de Congressos S. A, aceptó ayer la propuesta de la mesa de contratación y, pese a las críticas de los grupos municipales de la oposición en Cort del PSOE y Més, adjudicó al Grupo Barceló la gestión del complejo congresual y de su hotel anexo para los próximos 37 años.
El siguiente paso va a consistir en la ratificación del acuerdo de adjudicación por parte de la junta de gobierno del Ayuntamiento de Palma, lo que probablemente se realizará en la sesión del miércoles de la próxima semana.
Una vez obtenida esta ratificación, el consejo ha autorizado al presidente de Palau de Congressos, Álvaro Gijón, a iniciar los trámites para la firma del contrato. Según Gijón no se prevé ningún aplazamiento de la adjudicación al Grupo Barceló, tal como solicitan los grupos de la oposición, a quienes invitó a que "presenten impugnaciones por la vía que consideren oportuna si creen que no hemos actuado como debíamos".
También invitó a los representantes del PSOE y Més a que analicen con los técnicos de la mesa de contratación las puntuaciones dadas a Barceló y Meliá puesto que el consejo de administración se ha limitado a hacer suya la propuesta de adjudicación.
Al respecto, el PSOE denunció ayer que los pliegos del Palacio de Congresos "eran nocivos para el interés público", además de considerar "inadmisible que un gobierno agotado que da por acabada la legislatura vincule unilateralmente su futuro".
Por su parte, el portavoz de Més, Antoni Verger, denunció que el informe municipal que fijó el precio de la venta del hotel en 40,5 millones, "está caducado, puesto que solo tenía una vigencia de 6 meses, además de que los técnicos advierten de que cuando la autopista sea bulevar valdrá mucho más". Verger aseguró que su grupo hará "todo lo posible para parar esta aberración".
