Las fiestas de sexo y drogas de un famoso cantante en Ibiza

Drogas, bolsas con juguetes sexuales, chicas jóvenes, invitados apenas sin ropa y mucho desfase. Así eran las fiestas que el rapero y productor multimillonario P Diddy (antes conocido como Puff Daddy y de nombre real Sean Combs) ha organizado en Ibiza durante años, en cada uno de los viajes que ha realizado a la isla, donde también ha protagonizado algunos conciertos.

Diddy, de 54 años y ganador de cuatro Grammys, ha volado a Ibiza desde los años 2000, disfrutando hasta el máximo de la noche ibicenca, recorriendo todas las discotecas y acabando en su casa (alquilada) para seguir con la juerga hasta bien entrado el día siguiente.

Lo que ocurría en estas fiestas privadas ha salido ahora a la luz a raíz de que el FBI haya realizado redadas en dos de sus casas, en Miami y Los Ángeles. Los cargos que se le imputan son los de explotación sexual y se enfrenta también a cuatro demandas por violación y abuso sexual de menores. A finales de 2023, Combs fue demandado en cuatro ocasiones por supuesta violación, la última, presentada el 6 de diciembre, asegura que el rapero drogó en su estudio de Nueva York y violó a una menor de edad.

La demanda era similar a la entablada por Casandra Ventura, la cantante de R&B conocida como Cassie y exnovia de Combs, quien lo acusó de violarla y golpearla a lo largo de una década. Los dos llegaron un acuerdo económico para retirar la denuncia pocos días después de presentada la querella.

Las fiestas en Ibiza

Y ahora, en medio de todas estas duras acusaciones, una persona que trabajaba con P Diddy cuando estaba en Ibiza ha empezado a contar cómo eran las fiestas que se organizaban en las villas en las que se alojaba en sus estancias.

Según publica el The Sun, en ellas se podía ver bailarinas con muy poca ropa, importantes dj pinchando, bolsas llenas de juguetes sexuales, pintura corporal de chocolate... "No se repara en gastos en estas fiestas, eran puro hedonismo", explica el empleado al rotativo británico.

"En un de esas fiestas, que incluía un sistema de sonido proporcionado por Space, muchos de los invitados estaban tomando MDMA (éxtasis) y había invitados en distintos grados de desnudez y yendo a las habitaciones a mantener sexo, aunque no era una orgía. Era nuestra responsabilidad que todo saliera sin problemas y que los presentes tuvieran todo lo que necesitaban", añade.

Este trabajador también cuenta que el rapero era asiduo a las discotecas DC 10, Space y Amnesia pero que como tenía tendencia a irse de estos sitios sin pagar, al final su séquito se movía por la isla con una bolsa llena de efectivo para ir abonando las cuentas y repartiendo suculentas propinas entre los empleados.

El empleado añade: “Diddy bebía ponche y vodka Ciroc. Era muy exigente con sus bebidas. Además, siempre vestía impecablemente. Hubo rumores sin fundamento de que ponían MDMA en polvo en las bebidas de sus invitados, pero nunca lo vi”.

También recuerda la estancia del cantante en Ibiza en 2010, que llegó a la isla con su pareja de entonces, Cassie Ventura, de poco más de 20 años y que ella parecía “sometida” e “infeliz”.