Juan Egidas: "Voy en silla de ruedas y un autobús del TIB me ha dejado tirado en la parada"

Juan Egidas, con movilidad reducida y oxígeno por una dolencia, se quedó en tierra en Manacor «porque el conductor se negó a sacarme la rampa de acceso»

Juan Egidas junto a su mujer.

Juan Egidas junto a su mujer. / DM

Jordi Sánchez

Jordi Sánchez

Ayer por la mañana, un autobús de la línea A42 del TIB en dirección Cala Bona dejó en tierra a Juan Egidas Jabaloya, un hombre de 63 años que por problemas de salud se ve obligado a desplazarse en una silla de ruedas con una bombona de oxígeno.

Tal y como explicó ayer Egidas a este periódico, se encontraba en Manacor esperando al autobús de la línea A42 para ir hasta s’Illot junto con su mujer y la hija de una vecina, de un año de edad. Al subir en un primer momento su mujer con la niña al bus, ésta le preguntó al conductor si la línea paraba en s’Illot, a lo que le contestó de "malas maneras" que ella «tenía que saber hacia dónde iba». Tras este suceso, la mujer con la niña en brazos procedió a pasar la tarjeta por el lector y volvió a preguntar al conductor, esta vez para que le sacase la rampa a su marido, Egidas, explicándole que iba en silla de ruedas y no podía subir por su propio pie. Según explica la familia, «se bajó del bus, se quedó esperando sin hacer nada, cerró la puerta y se fue», dejando de este modo a Egidas solo en la parada, ya que su mujer y la niña sí que habían subido al bus. 

Aviso a la Policía Local

Acto seguido, su mujer le recriminó al conductor por qué había dejado a su marido en tierra, a lo que respondió que él había esperado y que la rampa la tenía que subir ella, que en aquel momento llevaba a la niña de tan solo un año en brazos, alegando que «no le tocaba a él». Tras volver a arrancar el bus, la mujer junto con la niña bajaron en la siguiente parada y anduvieron bajo el sol hasta la anterior parada, en la que se encontraba Egidas todavía esperando. Realizaron una llamada a la Policía Local, quienes aseguraron no poder hacer nada, así como a la empresa TIB (Transports de les Illes Balears), la cual respondió que el bus daría la vuelta para recogerle, algo que finalmente no ocurrió. 

Desde TIB aseguran que todos los autobuses de dicha línea cuentan con accesos para las personas con movilidad reducida y que todos los conductores están obligados a facilitar la entrada a los vehículos a estas personas