La nueva Ley para la Circularidad y la Sostenibilidad en el Turismo, aprobada ayer por el Consell de Govern, declara una moratoria de cuatro años para nuevos crecimientos hoteleros o vacacionales en Baleares. La norma encarga a los consells insulares a que establezcan un número máximo de crecimiento, que siempre debe ser inferior al número de plazas con las que cuenta la bolsa turística en la actualidad, y les da estos cuatro años de plazo máximo para hacerlo. 

En el caso de Mallorca, según la presidenta del Consell Catalina Cladera, la bolsa que gestionará a partir de abril la institución insular al recibir las competencias cuenta en estos momentos con 8.500 plazas que hasta hoy podían venderse para crear nuevos hoteles o establecimientos de alquiler vacacional. De estas 8.500 plazas de Mallorca, 4.840 eran para hoteles y 3.640 para alquiler turístico. Además, a partir del 2024 se habilitaban otras 14.000 plazas para ponerlas a su venta que también quedan suspendidas. En el conjunto de Balears la moratoria afectará a un total de 18.718 plazas de las cuales 8.486 corresponden a Mallorca, 7.000 a Eivissa y 3.232 a Formentera. Menorca no tiene bolsa de plazas.

Tras el decreto aprobado ayer por el Govern, todo ello queda en suspenso hasta que la institución insular modifique su Plan de Intervención Turística (PIAT) y fije un número máximo de nuevas plazas turísticas para la isla de Mallorca y que debe ser inferior a las 8.500 que marca en la actualidad su bolsa de reserva de plazas. En el caso de que los consells insulars no establezcan este tope máximo a la baja de plazas turísticas en cuatro años, el Govern las extinguirá de forma definitiva.

El Consell de Govern aprobó la norma como un decreto, por lo que sus medidas ya están en vigor a partir de hoy. De todas formas, se tramitará en el Parlament en forma de proyecto de ley por lo que durante la tramitación parlamentaria se podrán introducirán algunos flecos que han quedado pendientes durante la negociación que han llevado a cabo los tres partidos del Pacto de izquierdas, PSIB, Podemos y Més. El Govern sacó ayer un BOIB especial para que las medidas ya fuera efectivas a partir de hoy y así evitar la especulación con la posible compra de plazas turísticas.

Así ha presentado el Govern la nueva Ley de Turismo de Baleares

Se han establecido cuatro ejes principales sobre los que pilotará la nueva regulación turística: Sostenibilidad social y económica, circularidad y sostenibilidad medioambiental, sostenibilidad territorial, modernización y simplificación administrativa.

La nueva ley fue sido presentada en un acto solemne en el patio del Consolat donde la presidenta del Govern, Francina Armengol, aseguró que esta norma convertirá a Balears "en la primera destinación sostenible del mundo, ya que apostamos por la calidad en vez de la cantidad". La presidenta relató los principales ejes de la nueva ley turística, acompañada por los consellers de Modelo Económico, Iago Negueruela; el vicepresidente y conseller de Transición Energética, Juan Pedro Yllanes, y el conseller de Medio Ambiente, Miquel Mir. Armengol anunció también que se habilitarán 60 millones de euros para ayudar al sector a realizar las mejoras que marca la ley. 

La presidenta del Govern avanzó que se hará una apuesta por la formación, por lo que se destinarán 20 millones y otros 20 millones irán para la digitalización y la modernización de las empresas turísticas. Esta inversión, según el Govern, podría llegar a los 100 millones para impulsar iniciativas de mejora y modernización del sector al incluir los fondos europeos.

El conseller Negueruela admitió que se trata de una «moratoria» de nuevos crecimientos turísticos y calificó la norma de «ley pionera que homogenizará la actividad turística en Balears».

Entre estas mejoras destaca la necesidad de realizar un plan de economía circular en todos los hoteles y establecimientos turísticos, la posibilidad de ampliar instalaciones de forma horizontal un 15% a cambio de reducir un 5% el número de plazas. También se hace una apuesta clara por las condiciones laborales de los trabajadores del sector, como es caso de las camas elevables para reducir las enfermedades laborales de las camareras de pisos.

Las sanciones

El nuevo texto regulador del turismo de Baleares establece un régimen sancionador en caso de incumplimientos o infracciones por parte del sector turístico. De esta forma, el incumplimiento del plazo máximo para la instalación de camas elevables será sancionado con 500 euros por cada cama no instalada. No acreditar la documentación necesaria del Plan de Circularidad será sancionado con multa de 100.000 euros, mientras que no indicar de manera diferenciada en la carta o menú el marisco o el pescado de origen balear será sancionado con multa de hasta 1.000 euros.

El resto de infracciones tipificadas, como por ejemplo incumplir la obligación de eliminar las instalaciones térmicas, no disponer de doble pulsador en inodoros o hacer uso de especies clasificadas como amenazadas para el consumo alimentario, serán sancionadas con multas de entre 4.000 y 40.000 euros.