La inversión destinada a la construcción en Mallorca ha alcanzado un valor durante el primer trimestre de este año de 377,3 millones de euros, lo que supone un espectacular incremento de un 34,7%. Pero lo que no cuentan estas cifras es que esta subida tiene un carácter absolutamente excepcional y se explica por la coincidencia en la tramitación de tres megaproyectos que prácticamente suponen por si solos uno de cada cuatro euros del montante antes señalado, según los datos facilitados por la gerente de la asociación de constructores de Balears, Sandra Verger.
Estas tres grandes actuaciones son las reformas de dos instalaciones destinadas al alojamiento turístico de lujo, como son las del hotel Formentor, en Pollença, y Son Bunyola, en Banyalbufar, a las que se suma la del antiguo hospital de Son Dureta, en Palma. El presupuesto de la primera supera los veinte millones de euros, el de la segunda se acerca a los ocho millones, y el de la tercera supera los 60 millones, según destaca la representante de esta patronal.
Eso explica que la inversión destinada a las instalaciones turísticas sea una de las que más crece, al sumar este año 46,9 millones de euros, frente a los 27,1 millones del primer trimestre de 2020, con un alza del 73%. Pero hay que tener en cuenta que solo los dos proyectos antes mencionados alcanzan un valor conjunto de casi 30 millones de euros. Sin ellos, este apartado registraría un notable descenso, manteniendo la tónica del último año.
Donde se ha disparado el importe es en el apartado de obras relacionadas con instalaciones comerciales, industriales, sanitarias o de oficinas. Porque frente a los 19,1 millones de euros de los tres primeros meses del pasado año, en 2021 ese valor crece hasta los 87,1 millones, lo que supone un incrementos de casi un 345%. Evidentemente, el proyecto para la transformación del antiguo hospital de Son Dureta en un centro sociosanitario explica semejante evolución.
Pero tal y como insiste en subrayar Sandra Verger, se trata de tres actuaciones extraordinarias que han coincidido en este intervalo de tiempo tan limitado, algo que no se van a repetir a lo largo del resto del año, de ahí que no reflejen la evolución que la inversión en construcción va a mantener durante lo que queda de ejercicio.
Evolución de la vivienda
Por ello, se señala que es mucho más representativa la tendencia que se está dando en los proyectos para edificar viviendas, que aunque crece en relación al pasado año, lo hace de una forma mucho más moderada que la de los dos capítulos anteriores.
En el apartado residencial, la inversión registrada durante los tres primeros meses de este año se eleva a 243,4 millones de euros, frente a los 233,4 millones de 2020, en este caso con un crecimiento del 4,2%. Si nos ceñimos al número de viviendas incluidas en estos proyectos, durante este primer trimestre ascienden a 874, en este caso sí con un apreciable aumento respecto a lo que sucedía a principios del pasado ejercicio, cuando se contabilizaron 714. El aumento es del 22,4%.
El hecho de que crezcan mucho más la cifra de residencias que su valor se explica por el fuerte peso de los plurifamiliares, con desarrollos importantes en zonas como Nou Llevant de Palma, frente al ‘boom’ de chalés de otros ejercicios. Pero según hace hincapié Sandra Verger, no se trata de edificaciones pensadas para familias de poder adquisitivo medio-bajo, lo que supone que Mallorca sigue registrando un fuerte déficit de pisos a precio asequible para la mayoría de los residentes.
Los constructores estiman que a finales de 2021 la inversión habrá crecido, pero con tasas mucho más moderadas
Para el conjunto de 2021, la previsión de los constructores es que la inversión mostrará un crecimiento respecto a 2020 (año en que cayó un 23% en el conjunto de Balears), pero mucho más moderado que el del primer trimestre, y que podría situarse entorno al 5%.
