Si la deuda pública de Balears ya venía creciendo en los últimos años base de déficit en las cuentas, la crisis del coronavirus le da un nuevo empujón y seguirá creciendo, cada vez más cerca de los 10.000 millones de euros. Los presupuestos del Govern para el año que viene prevén un déficit de 295 millones de euros que elevarán la deuda a los 9.318 millones de euros. Además, la caída del PIB por el retroceso de la economía en un 40 por ciento supone un aumento del peso de la deuda sobre la economía de las islas. El ejecutivo autonómico reconoce que «lo óptimo» sería no endeudarse más y considera necesario que el Gobierno acabe dando un tratamiento específico a la deuda balear.
En una década, la deuda pública del Govern se ha duplicado, pasando de los 4.774 millones de euros a esos 9.318 millones con los que el ejecutivo autonómico prevé acabar 2021. Mientras la legislatura del Govern de Bauzá la deuda creció en medio de la crisis en 3.556 millones -1.600 por la bancarización de facturas pendientes de pago de la anterior legislatura-, desde la llegada de Francina Armengol y a pesar de la mejora de la economía hasta la fecha, la deuda ha seguido creciendo en casi 1.000 millones.
La consellera de Hacienda, Rosario Sánchez, atribuye la deuda a la «infrafinanciación» de la comunidad. «Es elevada, en gran parte por la infrafinaciación, y con la caída del PIB, el ratio se elevará aún más. Deberá hacerse un tratamiento específico para las comunidades», explica, recordando que reivindica la «condonación» por parte del Gobierno.
