El plan del Gobierno de Pedro Sánchez para disponer de los ahorros de los ayuntamientos pinchará en Mallorca. Con la negativa de los alcaldes de PP, Més y El Pi a entregar el dinero de sus consistorios, el Ejecutivo central apenas podrá pescar en los 500 millones que acumulan los consistorios de superávit en el banco. Las tres formaciones no sólo suman más de una treintena de alcaldías en la isla, sino que juntas suman mayoría en la práctica totalidad de los ayuntamientos de la isla, lo que aboca a un plante generalizado a prestar los remanentes municipales al Gobierno.
Después de anunciar Més y El Pi que sus alcaldes no transferirían "ni un euro" al Ministerio de Hacienda, el líder del PP, Biel Company, compareció ayer para anunciar que esta también es la postura de todos sus alcaldes, algunos de los cuales, como informó ayer este diario, ya habían manifestado su negativa a dejar prestado sus remanentes a Madrid. "Sánchez ha hecho un corralito a los ayuntamientos", denunció ayer Company, que criticó que "Armengol y el PSIB intentan defender lo indefendible" y recordando que "en todas las instituciones, siempre que se ha debatido este tema, el PSIB ha votado en contra de que se llevaran los ahorros de los ayuntamientos".
"La hucha de los campaners se queda en Campos", anunció en esta línea la alcaldesa popular de Campos, Xisca Porquer: "Si nos quieren robar, nos tendrán que obligar", compartió en sus redes, preguntando qué garantía tendrían de que después de quince años los consistorios recuperarán el dinero, tal y como plantea el plan de Hacienda.
El ministerio de María Jesús Montero llevaba varios meses buscando una fórmula para disponer de los ahorros de los ayuntamientos bloqueados durante años por la ley Montoro, para disponer de liquidez ante la caída de ingresos por la crisis del coronavirus. La propuesta de tomarlos prestados a cambio de devolverlos a lo largo de quince años con intereses ha indignado a los alcaldes, que reivindican poder utilizarlos ya en las necesidades de sus municipios. En total, 500 millones en el caso del conjunto de los ayuntamientos de las islas, de los que, sin embargo, apenas podrá disponer ante el 'no' de los alcaldes de PP, Més y El Pi, que suman más de una treintena de alcaldías.
El PSIB, solo
Los tres partidos han anunciado mociones en los ayuntamientos para impedir el envío de los fondos a Madrid, y juntos suman mayoría en la práctica totalidad de los municipios de la isla, con lo que garantizan el pinchazo del objetivo del Gobierno de lograr liquidez.
Sólo los alcaldes socialistas defienden el plan de Sánchez y la mayoría de ellos lo son a través de pactos con Més o El Pi. Sólo en los contados ayuntamientos donde los socialistas gobiernan con mayoría absoluta o con Podemos -que se abstuvo ante el plan en la asamblea de la FEMP- tendrán libertad de prestar sus remanentes al Ejecutivo de Sánchez.
