La Policía y la Guardia Civil arrestaron el jueves a 16 inmigrantes magrebíes que llegaron a bordo de dos pateras a la costa de Llucmajor, en Mallorca, y Cap Martinet, en Eivissa. Las gestiones policiales proseguían para tratar de localizar a más personas que hubieran arribado a Balears en estas dos embarcaciones.

Según informaron fuentes de Delegación del Gobierno, la patera de Mallorca fue localizada a las cuatro y media de la madrugada, en la zona de s’Estanyol. Tras descubrir la embarcación, la Guardia Civil puso en marcha un dispositivo para localizar a las personas que habían entrado de forma irregular en la isla.

Durante la mañana del jueves fueron localizados en la zona tres hombres, indocumentados y al parecer argelinos, que fueron arrestados por entrar ilegalmente en España. Por la tarde fueron detenidos otros dos. Los responsables del operativo creían que eran todos los que habían llegado esa madrugada en la patera. Los cinco detenidos fueron trasladados a las dependencias de la Policía Nacional, que se encargará de tramitar su expulsión.

Esa misma mañana, sobre las nueve y cuarto, fue localizada otra patera en la zona de Cap Martinet, en el término municipal de Santa Eulàlia, en Eivissa. De nuevo se puso en marcha un dispositivo de búsqueda en la zona que permitió localizar a once personas que presuntamente habían viajado en la embarcación.

La Policía descubrió que uno de los detenidos había grabado un vídeo con su teléfono móvil durante la travesía, lo que les permitió comprobar que en total habían viajado doce personas en esta patera. Los agentes proseguían ayer con las gestiones para tratar de encontrar a este último inmigrante, que no había sido localizado.

Los 25 detenidos hasta el jueves en relación con las tres pateras son todos varones magrebíes. Todos ellos procederían del puerto argelino de Dellys, punto de partida habitual de las pateras que llegan a Balears.

En este puerto es habitual que se concentren varias embarcaciones que aprovechan las condiciones favorables del mar para tratar de cubrir la travesía, de unos 300 kilómetros, que separa la costa argelina de Balears. Una travesía que en buenas condiciones se cubre en unas 24 horas. Las fuerzas de seguridad están en alerta ante la posible llegada de más pateras.

Dispositivo activo en Ibiza

Desde el Ayuntamiento de Santa Eulària han señalado a este diario de que dos patrullas y un jefe de servicio de la Policía Local participan en la batida.

Esta es la segunda patera que llega a las Pitiusas en menos de una semana. El pasado domingo nueve hombres arribaron durante la noche del domingo a la playa de Migjorn, en Formentera, en una pequeña lancha de color azul de unos cuatro metros y medio de eslora con un motor Yamaha de 60 caballos de potencia. Uno de los detenidos fue interceptado el pasado lunes cuando se disponía a embarcar en un ferri en el puerto de Ibiza rumbo a la península.

La Guardia Civil puso a disposición de la Policía Nacional de Ibiza, competente en Extranjería, a los detenidos, y el Juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, en funciones de guardia, organizaron el traslado de los siete argelinos mayores de edad a un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), desde donde serán repatriados. El resto, dos menores de edad, ingresaron en el Centro de Menores Padre Morey, en sa Coma, según informó entonces el director insular de la Administración del Estado en las Pitiusas, Enrique Sánchez.

50 personas arribadas en patera en diciembre de 2018

En diciembre del año pasado 50 argelinos llegaron en pateras a las costas de Ibiza. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y servicios jurídicos de la isla se vieron sobrepasados por la situación. Además, no se pudo ordenar el traslado de todos ellos a un CIE porque no había plazas disponibles, de forma que a 18 de ellos se les entregó documentación provisional y se les dejó en libertad. Sin embargo, debido a la falta de recursos en la isla para personas en exclusión social no se les proporcionó ningún lugar donde pernoctar.

A raíz de este problema, Cruz Roja de Ibiza y Formentera advirtió entonces de que se debía hacer una "reflexión" sobre los recursos existentes en las Pitiusas para atender a personas como los 18 inmigrantes puestos en libertad tras su llegada en pateras.

"Que esto sirva para aprender y mejorar y constatar la necesidad de que se creen los recursos necesarios para la gente que se queda en una situación así", explicaron desde Cruz Roja, que también destacaron la necesidad de que se impulse la construcción del centro de es Gorg que podría dar cobertura a personas en circunstancias similares a la de los inmigrantes.