Condena unánime. Esa es la reacción de las patronales en Mallorca contra los actos vandálicos de Arran de este verano, ahora centrados en causar destrozos en vehículos de alquiler para difundirlos a través de las redes sociales. La imagen de inseguridad que se proyecta con el ataque al sector turístico en plena temporada centró ayer las críticas de transportistas, agentes de viajes y hoteleros.

La semana pasada se denunciaron los ataques por parte de Arran contra coches de alquiler estacionados en Palma para protestar contra el turismo masivo y el lunes corrió como la pólvora un vídeo colgado en internet por los jóvenes independentistas. En él se ve cómo rompen lunas, pinchan ruedas y hacen pintadas contra los vehículos para denunciar que el sector del rent a car satura la isla con más de 100.000 vehículos.

Desde la Federación Empresarial Balear del Transporte (FEBT), que representa al 80% del sector del alquiler de vehículos, se externó su total "condena" al vandalismo de Arran, "un ataque a la actividad turística" dirigido contra compañías que generan "un turismo de calidad". Salvador Servera, gerente de la patronal, mostró su confianza en que los cuerpos y fuerzas de seguridad "paren estas acciones y su publicidad". El vídeo vandálico fue ampliamente difundido por diversos medios de comunicación.

Asimismo, la FEBT mostró su disgusto ante el silencio de las Administraciones en las islas, a las que reprochan que "no han salido a condenar" los actos del colectivo independentista. "Notamos a faltar el rechazo de las instituciones que tienen que ver con el turismo y el transporte", lamentó Servera.

Mientras desde la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca se declinó ayer hacer declaraciones sobre el acto vandálico, otras asociaciones del ramo sí fueron contundentes. Para la Asociación Hotelera de Palma(ASPAHAMA) el acto demuestra que "se deben tomar medidas" para que este tipo de ataques no vuelvan a suceder ni en Palma ni en la isla. La gerente de la agrupación, Mercè Peñaranda, que condenó los actos vandálicos en nombre de su presidente, Javier Vich, incidió en que el turismo repercute en todos las actividades de la isla y sus habitantes. Y tampoco desde el tratamiento del turismo de forma sostenible la violencia contra los rent a car es la manera de reivindicarlo. Peñaranda aludió a "la sensación de inseguridad" que provoca Arran y abogó por hacer "el menor ruido posible" alrededor de sus acciones porque son un colectivo que "no representa a la mayoría".

Fruto de "la ignorancia"

Los ataques de Arran van "contra el motor de la economía de nuestras islas", criticó Mauricio Carballeda. El presidente de la Asociación Hotelera Palmanova-Magaluf considera que esos actos son "fruto de la ignorancia y la inconsciencia" y muestran una "carencia total de sentido común" cuando "hay otras formas de expresarse", y no de esta manera para salir en la prensa internacional, "con la que está cayendo", dijo en alusión a la desigual temporada turística que se está viviendo.

En similares términos se expresó Isabel Vidal, presidenta de la Asociación Hotelera Platja de Palma. "Estamos en contra de cualquier acto vandálico; hay otra formas de hacerse escuchar".

Desde el sector de las agencias de viajes, el presidente de Aviba, Xisco Mulet, se declaró "sorprendido, no esperaba tanto atrevimiento"; el colectivo Arran "podría dirigirse de otra manera a la sociedad".

También Ciudadanos condenó las agresiones y desde El Pi, su presidente, Jaume Font, instó al Govern y a la Delegación del Gobierno a que actúen para pararlas. En temporadas pasadas Arran ya se hizo notar contra el turismo, en 2017 en un restaurante de Palma y el verano pasado protagonizó otro acto en Platja de Palma.