La directora de la cárcel de Palma, María Jesús de Dios Corchero, presentó ayer una denuncia ante la fiscalía contra el abogado Vicente Campaner, quien ha asumido la defensa penitenciaria de Bartolomé Cursach y Bartolomé Sbert, para evitar su traslado de centro penitenciario, como así está previsto. El letrado denunció la pasada semana a la directora, al no permitir en el centro que los dos presos firmaran su designación como abogado.

De Dios ha salido en defensa de los funcionarios de la cárcel que también han sido denunciados y ha trasladado su queja al Colegio de Abogados de Balears. En su escrito, la directora relata los hechos que ocurrieron la pasada semana, cuando Campaner intentó "entrar en el establecimiento penitenciario sin cumplir los requisitos legalmente exigibles". Expone que el jueves Campaner se presentó en la cárcel con un volante del Colegio como "letrado llamado" por ambos internos. En la denuncia se asegura que en la cárcel se le comunicó al abogado que no reunía los "requisitos imprescindibles" para comunicar "al no existir solicitud alguna de los internos para ello, ni constar como defensor en la causa por la que estaban en prisión". La directora denuncia que al día siguiente se repitió la escena. Afirma que Campaner acudió con un volante como "abogado que tiene asignada la defensa de esos internos", información que no coincidía con los expedientes penitenciarios de Cursach y Sbert. Desde la cárcel se consultó con el juzgado si Campaner era o no el defensor de los reclusos y se informó que no estaba personado en el caso.

La directora asegura que el subdirector habló con los internos, que se entrevistaron el viernes con el abogado. Sin embargo, según se afirma, el lunes pasado "Sbert por escrito y Cursach verbalmente, renunciaron a ser visitados por el letrado Campaner".

"Comportamiento vejatorio"

De Dios denuncia "el comportamiento vejatorio, agresivo, hostil y de claro acoso" del abogado contra la dirección, subdirección y varios funcionarios. La directora denuncia que se está produciendo una campaña mediática de "descrédito contra la institución y contra la plantilla del centro".

Por su parte, Campaner tachó de "inciertos" los hechos relatados por De Dios. "No es cierto que los internos no quisieran verme. De haberlo hecho ahora para que la denuncia sea más creíble, me imagino la presión a la que los han sometido para llegar a esta decisión", lamentó el letrado.

Insistió en que en la cárcel de Palma se vulneran los derechos de los presos. "No hay denuncia de un interno a los funcionarios que no se corresponda con la denuncia de estos" a los presos, señaló. "Curiosamente nunca me han denunciado hasta que no les he denunciado yo", dijo Campaner.