La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO en Baleares ha denunciado hoy que la Gerencia de Atención Primaria ha suprimido a partir de hoy los refuerzos que complementaban la atención urgente en los Puntos de Atención Continuada (PAC).
La organización sindical ha recordado en un comunicado que, hasta hace dos años, todos los centros de salud atendían las urgencias hasta las 21.00 horas, pero a raíz de los recortes aplicados por el Govern, se concentraron las urgencias de atención primaria únicamente en tres PAC, entre las 17.00 y las 21.00 horas, situación que afectó a unos 18 médicos, 16 enfermeras y 10 administrativos.
Para esas cuatro horas de atención urgente, cada uno de los tres PAC designados aumentó su plantilla en un trabajador por categoría profesional y, según CCOO, dicho refuerzo ha sido retirado mediante una resolución del gerente de Atención Primaria de Mallorca, Albert Anguera, a partir de hoy.
Por este motivo, el sindicato ha registrado un escrito ante el juzgado de guardia de Palma, advirtiendo de los riesgos que supone el recorte de la atención urgente tanto para la ciudadanía como para los profesionales sanitarios, cuando además se producen "en el momento álgido de la campaña de gripe".
CCOO ha criticado que al anular el refuerzo en las urgencias de atención primaria no se haya reorganizado el servicio.
El sindicato ha registrado el escrito ante el juzgado para "proteger a los profesionales" de los servicios de urgencias de Atención Primaria de "cualquier responsabilidad que se pueda derivar a consecuencia de la decisión" de la Gerencia y para reclamar que se defienda a los usuarios del sistema sanitario público.
El sindicato recalca que la decisión adoptada por la Gerencia de Atención Primaria no ha seguido los trámites legales y supone una "temeridad" ya que deja la atención urgente de 17 a 21 horas en situación "totalmente precaria" y previsiblemente generará "un colapso se prolongará durante la jornada de guardia".
La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO ha registrado también escritos de protesta ante el director del Servicio de Salud de Baleares (Ib-Salud) y ante en conseller de Salud, Martí Sansaloni, reclamando a ambos que se deje sin efecto la orden dada por la Gerencia de Atención Primaria.
En dichos escritos detallan que la retirada de los refuerzos lesiona los derechos de representación sindical, así como los derechos de los profesionales sanitarios porque no se ha analizado y evaluado previamente la situación y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Según el sindicato, con esta decisión se pone en riesgo a los profesionales sanitarios "al masificarles la atención, cargas y demás cuidados que, con la prontitud necesaria deben proporcionar a los usuarios y pacientes, aumentado exponencialmente el riesgo de error diagnóstico, esperas de los pacientes desproporcionadas, con consecuencias imprevisibles".
