A Bauzá le va a costar cuadrar las cifras. Y no solo porque su prometido recorte de 26 millones en altos cargos sea imposible, sino porque aunque lograse el milagro se toparía con que es un ahorro mínimo en un presupuesto ya capado. En los últimos dos años, la consellería de Economía de Manera aprobó tres grandes rebajas. La primera se gestó en otoño de 2009 y se hizo ley en los presupuestos de 2010, con un tijeretazo de 220 millones que convirtió a Balears en la única autonomía que redujo gasto. Pese a ello, el Govern se volvió a poner a dieta en mayo de 2010, cuando los ministros de Economía de la UE impusieron, entre otras medidas, el famoso funcionariazo: 103 millones de rebaja en el Govern y otros 33 en empresas públicas (medida de austeridad que el PP no apoyó en el Parlament). Y hubo un último adelgazamiento: en los presupuestos prorrogados para 2011 incluyeron 184 millones menos. En total, 540 millones de euros (90.000 millones de las extintas pesetas) en tijeretazo de Manera.