Al fin llega el último domingo de octubre, un gran día para los aficionados a la actividad cinegética porque se abre la temporada de caza del tordo, también denominado zorzal común. Los cazadores saldrán hoy a los bosques escopeta o filats en mano en busca de una de las aves más preciadas por los cazadores debido a sus excelentes cualidades gastronómicas.

Existen dos modalidades de capturar esta ave migratoria. La más usual es con escopeta y perro, aunque la más artesanal es la de filats en coll (redes). Esta última se trata de una forma más selectiva y muy arraigada en la isla, que sólo se puede utilizar en los montes de la Serra de Tramuntana. Así, desde primera hora del amanecer hasta bien entrada la mañana los cazadores se adentrarán en los bosques y campos rurales de Mallorca para la caza del tordo.

El jefe de servicio de Caza del departamento insular de Medio Ambiente, Bartomeu Seguí, explica que el primer día de caza del tordo es una jornada "simbólica" para los apasionados de la actividad cinegética. "La caza ha cambiado. Ahora no se sale a los bosques por necesidades de alimento, si no que es una actividad lúdica", comenta. Es decir, es como un acto festivo. Los cazadores, apunta Seguí, disfrutan de salir al bosque con los compañeros, tirar unos cuantos tiros, pararse a merendar y reanudar la caza.

El tordo es un ave migratoria. Bartomeu Seguí apunta que los primeros tordos, los jóvenes machos, ya han llegado a la isla, eso sí, no quiere decir que se queden en Mallorca porque si sopla viento fuerte de componente norte, pueden marcharse. Detalla que las primeras especies en llegar migran debido a que cuentan con un comportamiento genético hereditario. Así como avance el mes de noviembre y diciembre, llegarán los tordos más adultos, que suelen irse del centro de Europa si la nieve les impide encontrar comida.