La meteorología se ha aliado con la crisis económica para agravar la delicada situación por la que atraviesa el comercio balear. Las elevadas temperaturas han impulsado una caída en las ventas que llega a alcanzar el 40% en algunos establecimientos de moda y que se sitúa en torno al 20% por lo que a electrodomésticos de calefacción se refiere, según los datos facilitados tanto por las patronales isleñas y por las grandes superficies.

La situación más grave la están sufriendo las tiendas del textil, especialmente las dirigidas a la clientela adulta, dado que la moda infantil y juvenil se está resintiendo algo menos.

El vicepresidente de la patronal de comercio Afedeco, Pedro Mesquida, no duda en calificar de "pésimo" el nivel de consumo que se está registrando durante los meses de octubre y noviembre, y afirma que los estantes están "llenos de jerseys y chaquetones sin vender". Desde las grandes superficies se reconoce también esta mala coyuntura.

El vicepresidente de Afedeco recordó que en septiembre el sector se mostraba optimista ante la posible evolución de la temporada de otoño, pero admitió que las buenas espectativas se han desmoronado, ya que a la situación de crisis se han sumado unas temperaturas que desincentivan la adquisición de ropa de invierno.

Descensos de un 40%

Según Mesquida, los establecimientos con una oferta dirigida a la moda masculina son los que están soportando el impacto más duro, con descensos en su facturación de hasta un 40% respecto a noviembre de 2008.

Por contra, en el caso de las prendas dirigidas al público juvenil "el número de operaciones es similar al del pasado otoño, pero el valor de las adquisiciones es más bajo".

Pedro Mesquida recalcó la gravedad de esta situación para el sector, ya que "la temporada prácticamente se da por perdida". En concreto, el vicepresidente de Afedeco manifestó que quedan pocos días para que la demanda pueda registrar una relativa reactivación, ya que una vez superados los primeros días de diciembre el consumidor opta por frenar sus compras a la espera de que comience en enero la campaña de rebajas, especialmente si se tiene en cuenta que en las últimas ediciones éstas se han abierto con descuentos del 30% al 50%.

Del mismo modo, el presidente de la asociación de vendedores de electrodomésticos de Pimem, Tomás Garrido, afirmó que en su sector el descenso en la demanda se está situando entre el 15% y el 20%, provocado inicialmente por la crisis económica y del mercado inmobiliario, pero que durante las últimas semanas se está viendo agravada por una meteorología que hace innecesario el empleo de aparatos de calefacción. Esta situación también es apuntada por los grandes establecimientos comerciales.

Tomás Garrido advirtió que Balears es una de las comunidades autónomas en las que está caída del consumo es más pronunciada, y subrayó la grave situación financiera en la que están quedando muchos comercios, ya que bancos y cajas de ahorros "mantienen las restricciones en la concesión de créditos y los proveedores exigen cobrar al contado".