Alrededor de cien miembros del servicio público de salud respondieron a la convocatoria de Comisiones Obreras y se concentraron ayer durante media hora frente al Hospital Universitario de Son Dureta para exigir el cumplimiento íntegro de los pactos que ya se habían alcanzado con la Administración y para mostrar su rechazo por el preacuerdo al que han llegado la agrupación sindical Cemsatse y la conselleria de Salud.

Tal y como señaló ayer el miembro de la Federación de Sanidad de CCOO Jaume Pou, su agrupación no ratificará ese acuerdo en la mesa sectorial de hoy, ya que sólo tiene en cuenta los intereses de los empleados del 061 y del SUAP, mientras que "lesiona gravemente" al resto. Según Pou, unos 14.000 trabajadores "se quedan fuera", ya que se ha excluido del mismo el cobro del complemento de nocturnidad y festividad del sábado y se ha vetado el complemento de vinculación, puntos que además "ya estaban pactados".

Por su parte, el secretario de Acción Sindical de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Miguel A. Romero, criticó también el preacuerdo y señaló que su entidad tampoco lo ratificará en la mesa de hoy.

Por otro lado, los dos sindicatos señalan además que el plazo fijado ahora para el cumplimiento de los aspectos que afectan a todos los trabajadores es enero de 2009, algo que se señala como una "demora excesiva".

Tanto CCOO como UGT se critican con especial dureza la forma en qué se ha realizado este acuerdo fuera de los ámbitos naturales de negociación "con nocturnidad y alevosía". Ambos piden por ello que la Administración cambie la manera de llevar estas negociaciones, porque "no tiene ningún sentido que se cierren acuerdos fuera de la mesa", dijo Pou.