El Ejecutivo autonómico de Francesc Antich eliminará la zona residencial del ParcBit que viene recogida en el proyecto original ideado por el arquitecto británico Richard Rogers y que data del año 1996.

De esta manera se impide la edificación de 893 viviendas en los terrenos del parque tecnológico, que podrían trasladarse a otros lugares del municipio de Palma donde impliquen menor impacto ambiental.

La posibilidad de construir viviendas siempre supuso un elemento de controversia desde su concepción. Cuando a mediados de los años noventa el Govern del PP anunció el proyecto, los partidos de la oposición alertaron de que el parque tecnológico podría convertirse en una simple urbanización de lujo. Durante la anterior etapa de Francesc Antich al frente del Ejecutivo balear, también se propuso erradicar la zona residencial, aunque nunca se llegó a a ejecutar esta idea.

Finalmente, la desclasificación de los terrenos se producirá en breve y pasarán a un uso terciario. En una primera etapa se suprimirá de manera inmediata los 28.000 metros cuadrados de suelo residencial (167 viviendas) que estaban incluidas en la fase A. Esta superficie se dedicará a la instalación de infraestructuras de carácter tecnológico.

Paralelamente, la comisión técnica del ParcBit elaborará un estudio para promover también una reducción la superficie urbana de la fase B y una supresión del resto del suelo residencial, circunstancia que cierra las puertas a otras 726 nuevas viviendas.

Gracias a estos cambios, añadió Antich, será posible ampliar el invernadero de empresas de base tecnológica, que "se verá nutrido con la apertura, durante los próximos meses, de doce nuevos módulos, que se añadirán a los diez existentes". Otra de las medidas previstas por el Govern consiste en la construcción de un edificio que alojará equipos de investigación de la Universidad de las Islas Balears (UIB), que tendrá un coste de 7,5 millones, financiado al 50 por ciento con fondos europeos.