Mallorca tendrá pronto un nuevo Plan de Residuos que contempla el aumento de la incineración y que estará vigente hasta el 2013. Así Son Reus contará en el año 2009 con dos nuevos hornos que podrán quemar hasta 600.000 toneladas de residuos sólidos cada año, el doble de lo que se quema actualmente.

El plan que ayer se aprobó de forma inicial contempla inversiones por un total de 325 millones de euros. La mayoría de esta partida -246 millones- servirá para ampliar la incineradora, una opción que criticó la oposición.

Según el conseller de Cooperación Local, Miquel Riera, el plan revisa los objetivos de recogida selectiva al alza. Así, si en el año 2000 se preveía conseguir un 30% de recogida de papel, para el 2005 el porcentaje es del 68%. Aumenta también el cristal (del 41 al 68%), los envases (del 22,5 al 28%) y disminuyen un poco los residuos orgánicos (del 56 al 55%).

Vertido cero

El objetivo último del Consell es que no se vierta nada en los vertederos. A finales del año que vienen o a principios del siguiente está previsto que se clausure el de Son Reus que el año 2004 recibió 151.192 toneladas de residuos, un 27% del total que ascendió a 556.637 toneladas. De esta cifra, un 58% se incineró y un 13% se pudo recoger de forma selectiva.

La oposición ha criticado el nuevo plan que han definido como un fracaso de la política de recogida y reciclaje. La portavoz de EU-EV, Margalida Rosselló, aseguró que se trata sólo de que la concesionaria de la incineradora haga negocio. La portavoz del PSM, Catarina Canyelles, mantuvo que si se cumpliera el plan, la incineración no sería necesaria. El portavoz del PSIB, Manel Suárez, propuso instrumentos legales para cumplir el plan y convenios con los ayuntamientos.

Se aprobó también el aumento de la tasa de residuos en un 15%. Pasa de 78 a 90,96 euros.