A Unió Mollera Pollencina (UMP) le llueven estos días apetitosas ofertas políticas para que se decante por una de las dos opciones de pacto que tiene sobre la mesa el partido 'mollero', auténtico triunfador de las pasadas elecciones porque todas las posibilidades dependen de él.

Tanto Tots per Pollença como Junts Avançam, las dos formaciones mayoritarias en el municipio, han ofrecido al candidato de UMP, Andrés Nevado, la alcaldía de Pollença durante el último año de la próxima legislatura, entre otras ofertas, algunas de ellas conocidas y otras que aún no han trascendido.

Ante esta situación, Unió Mollera tiene previsto celebrar el próximo lunes una asamblea que podría ser definitiva para conocer la composición del futuro equipo de gobierno del municipio pollencí. En la reunión, a la que está previsto que asistan la mayoría de afiliados y simpatizantes del partido, se pondrán las diferentes ofertas sobre la mesa para que la gente se pronuncie sobre cuál es la más óptima para ellos. El candidato Andrés Nevado confirmó ayer que la asamblea será soberana a la hora de elegir con qué partido pacta UMP, si se decide por la continuidad junto al progresista Junts Avançam del actual alcalde Miquel Àngel March o bien se decanta por el cambio dando su apoyo al conservador Tots per Pollença, liderado por el exalcalde por el PP Tomeu Cifre Ochogavía. Ayer, Nevado no quiso dar ninguna pista sobre qué partido tiene más posibilidades de contar con el apoyo de UMP y se remitió a la asamblea del lunes para conocer la decisión final del partido 'mollero'.

En cualquier caso, todo apunta a que UMP contará con al menos un año de alcaldía en el ayuntamiento de Pollença porque cualquiera de las dos opciones han puesto esta posibilidad sobre la mesa.

El apoyo de UMP es imprescindible para que tanto Junts como Tots puedan formar gobierno, aunque no es suficiente, ya que unos y otros deberán comprometer el voto de otros partidos para contar con una mayoría estable.

El partido de Cifre lo tiene más fácil, porque, en el caso de contar con el apoyo de UMP, solo necesitaría un voto más para obtener la alcaldía y este podría ser de El Pi o el PP, con un edil cada uno. Por su parte, la coalición de Miquel Àngel March, que perdió uno de los seis regidores obtenidos en 2015, necesitaría otros dos apoyos más para alcanzar la mayoría absoluta. Lo más lógico sería convencer a la regidora de Alternativa per Pollença (que perdió un representante) y al nuevo edil de Unidas Podemos.