El PSOE se mantiene como la fuerza más votada en Palma en las elecciones generales celebradas ayer, al igual que el pasado 28A, pero el segundo puesto cambia totalmente, ya que el PP arrebata esa categoría a Ciudadanos, que ha sido relegado hasta la quinta posición. Los conservadores de Casado se han quedado parte de los votos del partido naranja en la capital balear, debido a que han ganado alrededor de seis puntos porcentuales. Sin embargo, para el partido de Rivera, el batacazo ha sido mayor, al perder poco más de 11 puntos. El trasvase también puede haber beneficiado a Vox, porque ha conseguido hasta seis puntos más que en las elecciones de la pasada primavera. Podemos sigue prácticamente igual y Més baja ligeramente.

Los votantes palmesanos han vuelto a depositar su confianza en Pedro Sánchez si solo se analiza la distribución porcentual, porque apenas baja un punto, del 26,85% obtenido el 28A al 25,62% actual. Sin embargo, el perjuicio en votos es mucho más elevado a causa del aumento de la abstención, ya que en abril los socialistas obtuvieron 51.305 apoyos procedentes de Ciutat y ayer esta cifra se redujo a 43.018 votos. La pérdida no ha sido traspasada a otros partidos de izquierdas o a Ciudadanos, sino que muchos votantes del PSOE hace medio año decidieron quedarse en casa.

El Partido Popular se sintió ayer victorioso en Palma gracias a su segundo puesto y al recuperar seis puntos porcentuales tras la debacle del 28A, cuando perdió la hegemonía en la capital y bajó a la cuarta posición después de tres décadas ininterrumpidas en el primer lugar en unas elecciones generales. El 10N ha supuesto para el PP obtener el 20,93% del pastel, con 35.146 votos, frente a los 28.287 votos de abril, que le dieron un 14,81% del reparto de sufragios palmesanos.

Claramente, estos 6.859 votos más proceden de Ciudadanos, que ha sido el gran perdedor en Ciutat y el resto del país, y aquí ha descendido a la quinta posición. La formación de Albert Rivera ha reducido su presencia en Palma a menos de la mitad porcentual de lo que tenía en abril, es decir, del 19,38% al 8,18%, aunque al mirar el número de votos, el batacazo electoral es mucho mayor, ya que en los pasados comicios, 37.027 palmesanos confiaron en este proyecto político conservador frente a los 13.728 de ahora, lo que significa que 23.299 electores de antes les han dado la espalda y han optado por otros partidos o por quedarse en casa.

Ciutat, bastión de Vox

Vox ha descubierto en Palma un gran caladero de votos y se está convirtiendo en su bastión, ya que el partido de extrema derecha ha conseguido en medio año ser la opción elegida por uno de cada cinco empadronados en Ciutat y subir del quinto puesto al tercero, pisándole los talones al PP con poco más de un punto porcentual de diferencia. Esto ha ocurrido en solo dos comicios generales, pero debe ser motivo de preocupación para los conservadores de Pablo Casado, porque a nivel balear sí logran mantener una distancia prudencial con los de Santiago Abascal. En cuanto al reparto, se sitúan en el 19,18% frente al 13% de abril, con 32.200 papeletas, 7.350 más que el 28A.

En el otro extremo del abanico político, Podemos se mantiene prácticamente igual en Palma, ya que los porcentajes obtenidos son similares, 18,31% hace seis meses y 18,03% ahora. No obstante, han recibido 4.710 apoyos menos al pasar de 34.980 a 30.270 votos en la capital balear. Se trata de casi los mismos sufragios recabados por el nuevo partido de izquierdas, Más País, que ha cosechado de los palmesanos 4.446 papeletas con un 2,65% del apoyo. El porcentaje de la formación encabezada por Íñigo Errejón es superior en Ciutat al de la unión Més-Esquerra, que ayer obtuvo un 2,55% sumando 4.288 votos, menos que los 6.090 de abril, con el 3,19%.

Con todos estos datos se extrae que la izquierda y la derecha están casi igualadas en Palma, con una pequeña ventaja a favor de PSOE, Podemos, Más País y Més.

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