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Los nuevos amos de Celsa nombrarán presidente a Rafael Villaseca en sustitución de Rubiralta

El exconsejero delegado de Gas Natural Fenosa pilotará la nueva etapa del grupo

El presidente de Fundación Naturgy, Rafael Villaseca, en una foto de archivo.

El presidente de Fundación Naturgy, Rafael Villaseca, en una foto de archivo. / EP

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Los fondos acreedores y nuevos amos del Grupo Celsa nombrarán a Rafael Villaseca como presidente del consejo de administración de la empresa en sustitución de Francesc Rubiralta, hasta ahora propietario de la empresa familiar más grande de Catalunya. La fecha del traspaso todavía no está clara y queda pendiente, entre otros, de la autorización del Gobierno. Vilaseca cuenta con experiencia previa en la gestión siderúrgica, hasta el punto que fue consejero delegado de una de las sociedades en Cantrabria que hoy pertenecen al propio grupo Celsa.

Los prestamistas de los Rubiralta lograron este pasado lunes el aval judicial para asumir el 100% del accionariado del gigante siderúrgico, que emplea a más de 10.000 personas en toda España -2.400 de ellas en Cataluña- y factura unos 6.000 millones de euros.

Según han hecho público los fondos este martes en un comunicado, el ex consejero delegado de Naturgy será el encargado de pilotar la transición entre los Rubiralta y la nueva etapa. Él y cinco personas más "con perfiles independientes", según han transmitido los fondos al sindicato USO en una reunión mantenida este miércoles.

Con este movimiento, los nuevos amos, entre los que se cuentan bancos como Deutschebank o fondos como HSBC SVP Global, entre otros, buscan transmitir confianza a las instituciones y red de proveedores del grupo siderúrgico. Ya que colocan a una persona conocida y vinculada al ecosistema empresarial local -es consejero independiente de firmas como Cementos Molins y ha estado vinculado a la histórica patronal Foment del Treball-.

Pendientes del traspaso

Tras la homologación por parte del juzgado del plan de reestructuración presentado por los acreedores del Grupo Celsa, la empresa apuesta por el ex consejero delegado de Gas Natural Fenosa para pilota la nueva etapa de Celsa. El traspaso, no obstante, todavía está pendiente de la autorización del Gobierno para que estos fondos de origen extranjero asuman el control de una empresa estratégica para la economía española, en virtud de la ley 'anti opas'.

Tres de los requisitos que el Ejecutivo se ha fijado como prioridad para validar la operación es que la nueva propiedad mantenga los actuales puestos de trabajo, el domicilio social en Catalunya y la integridad del grupo empresarial, evitando trocearlo y venderlo por partes. En estos mismos puntos ha insistido este miércoles Foment del Treball a través de un comunicado. "[La nueva propiedad debe] dar prioridad absoluta a los criterios de gestión industrial a largo plazo, sociales y sostenibles".

"Figura reconocida y de consenso"

Con este nombramiento, "los fondos apuestan por una figura reconocida y de consenso con la administración" y cumplen con el compromiso anunciado en su plan de reestructuración de poner la compañía en manos de ejecutivos independientes de primer nivel y con dilatada trayectoria profesional, han explicado.

Villaseca, ingeniero por la Universitat Politécnica de Catalunya (UPC) y MBA por IESE, fue consejero delegado de Gas Natural Fenosa durante trece años, de 2005 hasta 2018, y es el actual presidente de la Fundación Naturgy (antes Gas Natural Fenosa).

Villaseca fue nombrado consejero delegado del Año en los Platts Global Energy Awards 2010, los premios más importantes del sector energético a nivel mundial.

Su trayectoria también incluye cargos como consejero de Enagás, consejero-director general del Grupo Panrico, consejero delegado de Nueva Montaña Quijano, presidente de Gestión de Infraestructuras, presidente del Grupo INISEL (hoy Grupo Indra), presidente del Club Español de la Energía y Vocal de la Junta Directiva del Círculo de Economía.

El nombramiento, añaden los nuevos responsables de Celsa, supone "el reconocimiento por parte de los acreedores del carácter estratégico de la siderúrgica y de su importancia para la economía española", así como su compromiso con el objetivo de garantizar estabilidad financiera de la empresa, el mantenimiento del empleo y de las operaciones en España, así como su proyección internacional.