El precio de la vivienda nueva y usada en abril en Baleares y Canarias no ha experimentado variación respecto al mes anterior aunque sí ha subido un 5,5 por ciento respecto al cuarto mes de 2021, según datos de la estadística mensual de Tinsa.

Según los mismos datos, los precios han experimentado en Baleares y Canarias una subida del 28,5 por ciento respecto a los mínimos postcrisis, aunque la vivienda es un 12,6 por ciento más barata en relación a los precios máximos de 2007 y 2008.

En términos generales, la estadística de Tinsa muestra que la vivienda nueva y usada se encareció de media en España un 1,1 por ciento mensual en abril, lo que sitúa el crecimiento en tasa interanual en un 7,7 por ciento.

Todos los grupos reflejan incrementos significativos respecto a abril de 2021, mes en el que la mayoría de las zonas mantuvieron tasas de crecimiento contenidas, a excepción de 'Costa Mediterránea' y los territorios insulares, que ya comenzaban a mostrar precios al alza.

La directora del Servicio de Estudios de Tinsa, Cristina Arias, ha señalado que se observa una moderación de los precios en las zonas que comenzaron a registrar tendencias alcistas de forma más temprana en 2021, y un nuevo incremento en 'Capitales y Grandes Ciudades', donde se concentra la demanda y el espacio es más limitado, de forma que los precios aumentan más rápido.

Por otra parte, el precio medio de la vivienda nueva y usada en España se ha revalorizado un 29,6 por ciento desde el mínimo registrado en la crisis financiera. La caída acumulada desde máximos de 2007 en el índice general es del 22,7 por ciento.

Junto a las capitales y grandes ciudades (+1,1 por ciento mensual) también ha contribuido al impulso del precio medio en abril el grupo 'Resto de municipios', que representa a las localidades más pequeñas del interior y costa atlántica, con un 1,2 por ciento.

En 'Áreas metropolitanas', el precio medio mantiene una tasa de crecimiento de variación mensual similar a la del mes anterior. Por su parte, 'Costa Mediterránea' se desacelera ligeramente, mientras que los territorios insulares se mantienen estables tras la ligera corrección experimentada en marzo.

'Resto de municipios' y 'Áreas metropolitanas' son los grupos que presentan las mayores subidas respecto a abril de 2021, por encima de la media nacional: un 8,5 por ciento y un 8,3 por ciento, respectivamente.

Arias ha resaltado que, en conjunto, la demanda ha continuado activa, aunque varias zonas muestran signos de ralentización. La evolución reciente de los datos de empleo, ha añadido, con un incremento de los contratos fijos frente a los temporales durante los últimos meses, podría estar influyendo parcialmente en la dinamización de la demanda al facilitar el acceso a la financiación.

Aun así, las hipotecas continúan en una proporción equilibrada en comparación con la evolución del número de compraventas, lo que denota que el residencial continúa canalizando ahorros acumulados.

Por su parte, la oferta de obra nueva, sujeta a costes de construcción al alza, evoluciona con menor impulso, ha apuntado Arias.

Evolución desde máximos y mínimos postcrisis

El precio medio de la vivienda en España se ha incrementado un 29,6 por ciento desde su máximo en la crisis financiera, alcanzado en febrero de 2015.

En las capitales y grandes ciudades la recuperación alcanza el 35,9 por ciento y las áreas metropolitanas superan a las islas como el segundo grupo con mayor revalorización desde mínimos, con un 28,8 por ciento frente al 28,5 por ciento de Baleares y Canarias.

La recuperación está siendo más lenta en 'Resto de municipios', donde la subida desde mínimos es del 16,1 por ciento.

En el mes de abril, la caída acumulada en el índice general respecto a los máximos de 2007 se situó en un 22,7 por ciento. La brecha es mayor en la costa mediterránea (-33,1 por ciento) y en 'Resto de municipios' (-32,4 por ciento). Por el contrario, las islas destacan como el área que más próxima está sus precios máximos, con una caída del 12,6 por ciento.