Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023

El Mundial pone a prueba a Jorge Vilda: "En el fútbol hay que renovarse"

A medida que han pasado los años, las criticas hacia el papel de seleccionador han ido en aumento, llegando a su máximo exponente a raíz del caso de 'las 15'

Jorge Vilda

Jorge Vilda / Europa Press

Laia Bonals

Es el momento de la verdad para Jorge Vilda. El seleccionador español llega al Mundial de Australia y Nueva Zelanda en el punto de mira. Tras la polémica que ha sacudido el vestuario este último año, ha llegado la paz (al menos momentánea) de cara a la cita mundialista. Todos van a una, con la profesionalidad ante todo, y con ganas de demostrar que España puede resolver un torneo continental con garantías. Este viernes, contra Costa Rica (9.30h, La2), llega el primer test.

El seleccionador español empezó su trayectoria en los banquillos en 2010 de la mano de la Federación y junto a su padre, Ángel Vilda, preparador físico del Barça en la época del Dream Team de Johan Cruyff y que posteriormente pasó a ser entrenador absoluto en la Federación Española de Fútbol en diferentes categorías. Sin experiencia en el fútbol de clubes, Jorge Vilda comenzó de ayudante de su padre en la femenina sub-17, a quien acabaría sustituyendo un año después. El mismo guion se repitió en la sub-19 en 2014, un año antes de que fuera designado en 2015 seleccionador absoluto tras la salida de Ignacio Quereda del combinado nacional, tras 27 años en el cargo, tras una rebelión de las jugadoras ante sus métodos.

Desde entonces, Vilda ha hecho de la selección su casa. De hecho, el seleccionador también ostenta el cargo de director técnico del equipo femenino en la Federación, es decir, es su propio jefe. Por encima de él hay pocos cargos y él rinde cuentas directamente con el presidente de la Federación, Luis Rubiales, quien siempre le ha mostrado su apoyo inquebrantable en público, pese a que en los siete años que lleva en el asiento noble del banquillo de la selección no ha levantado ningún título.

A medida que han pasado los años, las criticas hacia el papel de seleccionador han ido en aumento, llegando a su máximo exponente a raíz del caso de 'las 15'. La estructura poco profesionalizada y su inmovilismo ante los cambios le han llevado a vivir uno de los años más complicados de su carrera. Eso, acompañado de los malos resultados en la pasada Eurocopa de Inglaterra, hace de este Mundial un momento clave en el porvenir del entrenador madrileño.

¿Cómo es Vilda como seleccionador?

Un elemento clave para Vilda es su 'staff'. "Es muy fiel a los suyos. Es cierto, sin embargo, que siempre se ha rodeado de gente con menos conocimientos, pero que le es fiel. Es su manera de protegerse y mantenerse. De hecho, las jugadoras han pedido mejoras en el cuerpo técnico, pero él es reticente para no dejar a la vista sus carencias. Esto tiene cosas buenas, porque él cuida a su gente, pero no le permite mejorar", mantienen fuentes próximas al vestuario. "Es controlador. Él mismo debe tenerlo todo siempre controlado", añade la misma fuente.

Jorge Vilda y Alexia Putellas en un entrenamiento previo al Mundial.

Jorge Vilda y Alexia Putellas en un entrenamiento previo al Mundial. / RFEF

Su cuerpo técnico se ha reforzado para este Mundial. De cara a la cita de Australia y Nueva Zelanda, la Federación ha incorporado más profesionales y ya llega a la treintena de efectivos. Entre las novedades para la cita mundialista estará la incorporación por primera vez de un nutricionista de las jugadoras y la presencia de cuatro fisioterapeutas, uno más que en la Eurocopa, según dio a conocer la Federación antes del Mundial. En términos de comunicación, también se han reforzado el equipo de cara a la cita.

Pero, ¿a qué juega la España de Vilda? "Pues la verdad es que no sabría decir", relata una persona conocedora de la metodología aplicada en la selección. "Es un problema claro cuando llevas muchos años en un equipo y la gente aún no sabe identificar a lo que quieres jugar", añade.

Pese a la pobre imagen mostrada en la eliminación en la pasada Eurocopa, los últimos resultados permiten a la selección llegar con buenas sensaciones al debut contra Costa Rica de este viernes. Las victorias ante la todopoderosa Estados Unidos y contra Noruega hace unos meses y la goleada contra Vietnam llevan en volandas a una selección que espera resarcirse en este Mundial y conseguir por primera vez en su historia el pase de octavos de final.

Jorge Vilda con las jugadoras de la selección durante una charla en un entrenamiento.

Jorge Vilda con las jugadoras de la selección durante una charla en un entrenamiento. / RFEF

La plantilla de España es de las mejores en los últimos años. Pese a tener bajas sensibles como Mapi León, Patri Guijarro y Claudia Pina, que han decidido no volver a la selección, los trofeos no han acabado llegando. Una de las claves, según las fuentes consultadas, es la preparación del equipo. De hecho, esta ha sido una de las quejas de las futbolistas en su reclamación de mejoras antes del Mundial y de los clubes en los últimos tiempos.

"La preparación física no era la adecuada", cuenta otra fuente que conoce los entresijos de la selección. "Estás hablado de jugadoras profesionales, que en sus clubes tienen a grandes profesionales, y tú les repetías lo mismo desde las etapas formativas. La metodología se había quedado obsoleta. En el fútbol hay que renovarse", concluye.

De cara a los partidos, "le cuesta atreverse en los planteamientos, a la hora de hacer cambios. Le cuesta ser intervencionista y tener iniciativa. Es cierto que le es más fácil hacerlo contra equipos menores. Habrá que ver cómo se desenvuelve en el Mundial", cuenta una de las fuentes consultadas por EL PERIÓDICO, del grupo Prensa Ibérica.

España se estrena este viernes con la intención de empezar una nueva era. Cambiar la dinámica, sumar los partidos por victorias y llegar lo más lejos posible en un Mundial que puede sentenciar o hacer renacer a Jorge Vilda.

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