Carlo Ancelotti, que fue despedido en su primera etapa del Real Madrid por su “mano blanda” con el vestuario, está mostrado su puño de hierro en esta segunda aventura en la Casa Blanca. Hasta el punto de convertir el banquillo blanco en el más caro del mundo.

La imagen de Bale, Hazard y Jovic en el banquillo no ha gustado en las oficinas del club. Florentino Pérez pagó por ellos 271 millones de euros, según la versión oficial. Carletto ha tenido buenas palabras para los tres, pero no cuenta con ellos. Hasta el punto de torcer el gesto cuando un periodista le insistió por la suplencia de los tres. “¿Por qué hablas de Bale, Hazard y Jovic? ¿Por qué no hablas de Ceballos, de Carvajal? ”, interpeló con rostro serio el entrenador al periodista.

“Vagos y egoístas”

Ancelotti reveló al diario alemán ‘Die Weit’ tras su salida del Real Madrid lo que no tolera en los futbolistas: “Yo no me enfado cuando un jugador comete un error. Todos somos humanos y sé lo que es porque yo también fui futbolista. No soy de echar broncas, me gusta el diálogo. Lo que me molesta es que no tengan actitud, que sean vagos o egoístas”.

De Hazard (15 partidos, 831 minutos y un gol) llegó a decir: “Eden ha vuelto”. Pero Carletto se ha cansado de darle oportunidades y su indolencia entrenando. La “vaguería” del belga, de lo que es testigo toda la plantilla en el día a día, le ha condenado. El caso de Bale (3 partidos y 193 minutos, todos en agosto) es singular. El italiano confiaba en resucitarlo, pero tras recuperarse de una lesión, y sin haber entrado aún en una convocatoria del Madrid, se marchó con Gales y volvió roto. Entonces Ancelotti, cansado del “egoísmo” de Bale, le puso la cruz. Por su parte, Jovic lleva tres temporadas en el Madrid, menos seis meses que jugó cedido en el Eintracht, y suma tres goles. En la actual ha disputado 432 minutos en 15 partidos, pero su frialdad le alejó del núcleo duro del vestuario. 

La intransigencia del técnico se ha convertido en un problema para Florentino, porque Hazard y Jovic tienen contrato hasta 2024 y 2025, respectivamente. El Madrid necesita que jueguen para ponerles en el escaparate. El plan es invertir la ficha de Bale y Hazard (31,9 millones brutos al año y 22,9) en la de Kylian Mbappé, con quien tiene cerrado un acuerdo por 50 millones anuales brutos. En el club incomoda la imagen del banquillo más caro del mundo, pero Ancelotti tiene claro que apostará por su núcleo duro, de 15 jugadores, para sacar adelante la temporada. Y ahí no tienen hueco “vagos o egoístas”