Son heroínas y son mallorquinas. Patri Guijarro (Palma, 1998) y Cata Coll (Palma, 2001) fueron decisivas para el histórico pase a la final de la selección española ante la anfitriona Francia en el Mundial sub-20 (1-0). La centrocampista marcó el gol del triunfo y la portera paró un penalti que lo podría haber cambiado todo. Eso fue el lunes, pero es que estas dos jugadoras, formadas en el Collerense, siguieron ayer acapararon ayer minutos de radio y televisión y ocupando muchas páginas en los medios de difusión nacional. No es para menos. Son las protagonistas de una gesta que debe culminarse este viernes, ante Japón, a las 19:30 horas (Gol Televisión y Eurosport).

"Este equipo no tiene límites", subraya orgullosa Guijarro, que está deslumbrando en este torneo de máximo nivel. Lleva seis tantos, que la convierten en la máxima goleadora del campeonato, y eso que no es delantera, y tres asistencias, en apenas cinco encuentros. Es la auténtica líder de un grupo, bajo la dirección del seleccionador Pedro López, que se cree capaz de todo. "Hay que aprovechar este momento y ganar a Japón en una final", resalta recordando que en la fase de grupos ya consiguieron tumbar al combinado nipón (1-0). Y lo dice con un tono de revancha. "Estuve en la final del Mundial Sub-17 en 2014 contra Japón. Ese año nos ganaron, este año tiene que cambiar", añade convencida.

La jugadora del Barcelona tiene claro por dónde pasa el título. "Tienen mucha intensidad, son ordenadas y tienen calidad, pero nosotros tenemos que hacer nuestro partido y nos irá bien", comenta. La capitana de la selección sub-20, que puede presumir de ser una habitual con la absoluta, explicaba a DIARIO de MALLORCA antes del inicio del Mundial que empezar jugando a fútbol con chicos le ha ayudado en su formación. "Ayuda mucho en el aspecto físico", señala esta estudiante de fisioterapia que ha marcado dianas de todos los colores en este Mundial. Incluso de forma extraña, como el que dio el pase a la final. "Lo importante es que entró", señala entre risas. "El gol es muy significativo porque sirve para clasificarnos para la final de un Mundial sub-20 por primera vez en la historia", comentó antes de mostrar su absoluta confianza en Coll cuando Francia se disponía a tirar el penalti. "Lo hizo muy bien, de Mallorca y del Collerense tenía que ser", bromeó ayer en repetidas ocasiones muy satisfecha una jugadora que se ha convertido en un referente en el vestuario, más allá de lo que aporta en el campo.

"Nos motiva y siempre sale ella para tirar del carro", explica acerca de su paisana Cata Coll, que a pesar de ser más joven que la mayoría de sus compañeras de equipo, está asombrando por su personalidad, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Ya lo dejó claro cuando le tocó afrontar uno de los momentos más delicados de su corta carrera. La árbitro señaló pena máxima por una clara mano de Laia Aleixandri dentro del área. La guardameta se creció y, por mucho que delante tuviera a la verdugo de España en la final del Europeo en 2016-, se obligó a despejar el balón de la atacante del París Saint-Germain, Marie-Antoinette Katoto. "Sabía que tenía que parar el penalti por mis compañeras. Así cómo se colocó a la hora de chutar intuí que lo iba a chutar hacía donde me tiré", asegura con un tono de satisfacción infinito.

Esta parada llega después de muchas otras, que ya la han convertido en campeona de Europa sub-17. La portera del Collerense le ha ganado la partida a Noelia Ramos, del Sevilla, y Misa Rodríguez, del Atlético de Madrid, para ser titular. Y sus actuaciones le han dado la razón al seleccionador, que junto al preparador de porteras, López Vallejo, se encargan de supervisar su trabajo. De hecho, la de Pòrtol desveló en Marca que habían ensayado los penaltis en la previa. "Teníamos estudiado cómo los tiraban", desvela antes de deshacerse en elogios hacia la figura del propio López Vallejo. "Es uno de los mejores entrenadores con los que he trabajado. Empatiza muchísimo con nosotras, nos da grandes consejos y nos arropa, tanto en los buenos como, sobre todo, en los malos momentos", destaca.

Coll, que seguirá una temporada más en el Collerense en Segunda División, cree que tienen opciones de conquistar el Mundial. "Japón es una de las favoritas. Les ganamos una vez y por qué no dos. Estamos preparadas. Será un partido parecido y sufriremos mucho, pero sabemos sufrir y lo hemos demostrado", resalta sin titubear. Tanto Cata como Patri, junto al resto de sus compañeras, fantasean con la idea de hacer historia. Está en sus botas, pero lo que es seguro es que, pase lo que pase, ya son el orgullo del Collerense y de Mallorca.