El Sóller Bon Dia! sacó la versión casera para lograr su segunda victoria liguera. El marcador induce al engaño, pues las de Jorge Méndez no fueron tan superiores a las de Domingo Díaz. La mejor noticia para las de la Vall fue la aportación del baquillo en los minutos críticos que les permitieron dar la vuelta al partido.

Las sollericas empezaron con pérdidas de balón y poco acierto ofensivo, al tiempo que su previsibildad las hacía muy vulnerables. Al menos en defensa controlaban a Rees mientras Murphy y Michael comenzaban su pulso particular. La mayor claridad canaria les permitó liderar todo el acto, pero en el segundo las de Méndez tomarían las riendas con un 8-0, toda vez que alguien más que Vega y Murphy se atrevió a mirar el aro. Con la zona Domingo Díaz pudo frenar al Sóller, pero Michael se perdía por completo y Rees seguía inédita. Aguantando el pulso y tirando de Murphy llegarían al descanso con ligera ventaja 34-31.

En la reanudación el partido se trabó con más de tres minutos de juego errático. Rees se iba metiendo en la dinámica de partido y los triples de Staalvant cambiaban el tercio devolviéndoles la moneda con otro 0-8,(40-43). Eran los perores minutos del Sóller Bon Dia!, que volvía a perderse en ataques previsibles con sus habituales referencias.

Algo había que inventar y Méndez apeló a la rotación buscando el factor sorpresa. Y este llegaría de la mano de Quirante, que con dos triples hizo saltar la banca y la zona canaria dando ventaja de nuevo al Mariana.

En tres minutos las de Méndez, con la rotación en pista desquiciaban al ´Granca´ con su intensidad defensiva, Nicole Michael estaba totalmente fuera de partido y la reacción canaria no encontraba ni su momento ni su protagonista. Ya con el bonus se hizo más fácil abrir brecha en el electrónico para sellar un triunfo muy necesario.