El fotógrafo mallorquín Pep Bonet convierte ‘Paradís’ en una pequeña joya editorial

El reputado artista, con tres premios World Press Photo, publica un libro con artesanales y poéticos retratos de personas conocidas y anónimas en una Mallorca mágica que desaparece

Pep Bonet, fotógrafo: “Es un proyecto muy artesanal y cierra el círculo del fotógrafo de antaño”

B. Ramon

Raquel Galán

Raquel Galán

Pep Bonet ha vuelto a ser niño con Paradís. «Las fotografías del libro son muy pictóricas y tienen un aura antigua que me lleva a mi infancia, cuando en Mallorca aún había mucha magia». La retrata en esta pequeña joya de edición limitada publicada por Disset en su 30 aniversario. Galardonado hasta tres veces con el World Press Photo, el prestigioso fotógrafo también regresó a la niñez con el artesanal proceso de creación.

«Era incontrolable y lo que más me excitó de este proyecto, ya que tras tantos años fotografiando y controlando todo, aquí no sabía qué iba a pasar. Es con lo que más disfruté, como cuando eres niño y te diviertes con algo que aún no dominas». Las imágenes de 41 personas anónimas y conocidas, como Miquel Barceló y Maria del Mar Bonet, entre otras muchas, fueron tomadas con una cámara Polaroid, aunque después alteró tiempos de espera, usó negativos en vez de los habituales positivos, limpió con lejía, eliminó rostros, dejó manchas e ideó una nueva manera de hacer fotos que «cierra el círculo del fotógrafo de antaño, disparando película».

El artista Rafa Forteza retratado en 'Paradís'

El artista Rafa Forteza retratado en 'Paradís' / Pep Bonet

Además de artesanal, Bonet presenta un proyecto poético con la naturaleza como protagonista. «Es mi pequeño paraíso, el que empleo para crear las fotografías», en las que retrata «la relación de los mallorquines con su entorno natural», sin más añadidos que la luz natural de lugares como el Molinar, el Portitxol, Cúber, s’Illot y varias fincas particulares. Cada imagen viene acompañada de una frase, precedidas todas ellas por la poética introducción de Biel Mesquida, que en una de las fotos abraza un libro en blanco. «Me emocionó, me encantó. Hay un montón de adjetivos que están relacionados con los personajes. Es un texto precioso que cuenta todo y no cuenta nada, y eso es para mí la magia de escribir y, a veces, de fotografiar, que menos es más, dejar a la gente que forme parte del lenguaje y pueda sacar sus propias conclusiones».

A la espera de exposición

La lujosa edición de Paradís, de 600 ejemplares, será presentada este jueves a las 17 horas en Rialto Living (Palma), aunque el autor también espera poder realizar una exposición, como la que hizo el año pasado en la Fundación Michael Horbach (Colonia) con 137 fotografías de este proyecto. «De momento no tengo nada en Mallorca», afirma. Cuando surja una buena propuesta, Pep Bonet sacará los marcos familiares y los adquiridos en el mercadillo de Consell –«he ido muchos días»– con las artísticas imágenes de su trabajo más personal, que inició para retratar a su familia con la Polaroid y se ha convertido en un canto al paraíso perdido.

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