MÚSICA CRÍTICA

Fin de año con Wagner

Pere Estelrich i Massutí

Pere Estelrich i Massutí

El concierto que cada primer día del año se organiza en Viena y que se transmite por todas las televisiones del mundo, es el acontecimiento musical clásico más visto del año, pues en la mayoría de hogares de occidente se escuchan los valses y polkas de la familia Strauss.

Ahora bien, sin tanta parafernalia comercial, el día antes (de hecho, en diferentes sesiones algunos días antes), la Filarmónica de Berlín propone una sesión que también merecería una atención similar, por su calidad e interés. Se trata del recital que, dirigido por el titular de la formación, Kirill Petrenko, reúne a figuras del canto o solistas de algún instrumento y que, se retransmite, no por todas las televisiones del mundo, pero sí a través de algunas salas de cine. Aquí, en Mallorca, tuvimos la suerte de poder ver y escuchar este evento, en una de las salas Ocimax de Palma, en pantalla grande y con un sonido impecable.

En el programa, un monográfico Wagner, con la Obertura y la escena de la bacanal de Tanhausser como aperitivo y, como segundo plato, el primer acto completo de La Walkiria, en el que las tres voces mostraron su buen hacer en ese repertorio, donde cada uno ha llegado a cimas importantes: Kaufmann es un Sigmund de primera, Kehrer, que posee una voz contundente que le permite cantar papeles como el de Sarastro, aquí cantó un Hunding de primera y Vida Mikneviciuté, como Siglinde, equiparó su versión a las de las mejores del momento.

La orquesta, como era de esperar, excelente, con un Petrenko plenamente identificado con el wagnerianismo.

En definitiva, una tarde para el recuerdo que bien merecía la asistencia de un público más numeroso. Gracias a los que hicieron posible poder contemplar en Palma y al mismo tiempo que los melómanos berlineses, un acontecimiento musical importante.

Suscríbete para seguir leyendo