En diez minutos se agotaron los 700 tiques para conseguir un autógrafo de Joana Marcús en Madrid el próximo sábado y los 300 reservados para las firmas en Palma (librería Agapea) el sábado 12 de noviembre. La escritora mallorquina, que este miércoles ha publicado su nuevo libro, Después de diciembre, continúa revolucionando la novela juvenil con una gira que se inicia en la capital estatal y la llevará a la prestigiosa Feria del Libro de Guadalajara (México).

¿Le da vértigo el éxito?

Mucho. Todavía no he tenido ni un momento para pararme a pensar en todo lo que me está ocurriendo. Lo estoy viviendo a muchísima velocidad.

Hace un año dijo que no era muy consciente del alcance del primer libro, Antes de diciembre, y que es más difícil mantenerse que llegar. ¿Lo ha logrado?

Creo que aún es pronto para saberlo. Cuando hayan pasado unos cinco años, si puedo seguir vendiendo libros y viviendo de esto, diré que me he mantenido y que realmente está saliendo bien. Ojalá sea así.

En esta segunda parte, tanto el tono como los temas parecen más duros. ¿A qué se debe?

El tono duro ya comenzaba a intuirse en Antes de diciembre porque planteaba las tramas que ahora se cierran en este libro, como por ejemplo las relaciones de maltrato de padres a hijos, de pareja o incluso entre amigos. Aparece sobre todo el maltrato psicológico, del que no se habla porque está normalizadísimo, pero al que tenemos que ponerle fin de alguna manera.

También trata la adicción a las drogas en la figura de Ross.

Le puede ocurrir a cualquier persona, aunque me centré en él porque cuando creé el personaje me imaginé su contexto y un niño rico, que ha sido criado con todos los lujos que ha querido, lo tiene más fácil. Recibía una relación de maltrato por parte de su familia y se sentía totalmente perdido, por lo que desgraciadamente lo más habitual es que tirase hacia las drogas, ya que tenía dinero para comprarlas.

¿Es un tema que le preocupa porque lo ha conocido?

Cuando tenía 15 años había ciertas amistades que empezaron a tomar sobre todo marihuana, porque está muy normalizada. Decían que sale de la tierra, que no tiene por qué afectar, que es peor el tabaco... A medida que creces y reflexionas al respecto, piensas: «qué poco informados estábamos en ese momento».

«Este libro es para nosotras», para quien «siempre se cae pero nunca se queda sentada en el suelo», afirma en la dedicatoria. ¿Es una novela feminista?

Cuando escribí el libro para la plataforma Wattpad, en la que muchísimos lectores van dando su opinión sobre los personajes y la trama, me di cuenta de que los personajes femeninos siempre eran mucho más juzgados y de una forma mucho más dura. El mismo error cometido por un chico no era tan criticado como las equivocaciones de ellas. Me ha sucedido también en el resto de libros en internet, da igual el tipo de público. La protagonista, Jenna, fue muy criticada al final del primer libro por su decisión de dejar a Jack Ross y, como me dio mucha pena, en la segunda parte he incidido en el derecho que tenemos a equivocarnos.

Lo hizo por amor.

Claro, pero incluso por otros motivos. Todos nos equivocamos en diferentes cosas y aprendemos de nuestros errores.

¿Piensa en el público al que se dirige? Muchos lectores acaban de entrar en la adolescencia.

Intento escribir de forma que lo pueda leer alguien joven que está iniciándose en la literatura y un adulto experimentado que quiere algo ligero, tipo romance juvenil. Sin embargo, hay ciertos mensajes, sobre todo cuando son temas sensibles, que los trato con mucho cuidado. Nunca escribiría nada glorificando las drogas, por ejemplo, aunque el libro fuese solo dirigido a adultos.

¿Hay algo autobiográfico?

Siempre hay toques. Puede ser un personaje que tiene algo en común conmigo, una situación que haya vivido o haya ocurrido a alguien cercano a mí y cosas de este tipo. De todos modos, creo que todos los personajes tienen algo de mí.

En Wattpad ya está publicada toda la saga protagonizada por Jenna y Ross, como la trilogía de la androide Alice, su otro gran éxito. ¿Por qué los jóvenes de la era digital se lanzan al papel?

Creo que les hace ilusión tener los libros en papel debido a que es la representación física de que las historias que conocieron en internet, y que fueron escritas por una persona joven, como ellos, han tenido éxito. Supongo que soy alguien cercano que empezó de cero y ha podido cumplir su sueño. Tal vez se ven reflejados y les anima a cumplir los suyos.

Quería aventurarse con la novela negra. ¿Ha probado?

Sigue el gusanillo, aunque aún no lo he liberado. Solo está en mi subconsciente. Las historias que se me han ocurrido hasta ahora se guían más por la fantasía o el romance contemporáneo. Tengo ideas para una novela negra, pero ninguna suficientemente buena como para decir «con esta quiero empezar» y ponerme a escribir un género nuevo para mí.

¿Hay tiempo para continuar estudiando Psicología?

El año pasado ya recibí una buena lección: Casi me muero al coger tantas asignaturas. Así que este curso he elegido menos y que no tengan prácticas para poder compaginar todo mejor. Me está yendo muy bien así.

¿Ha cambiado algo la Joana anónima de un pueblecito de Mallorca?

Todo esto de las colas para las firmas de autógrafos solo lo veo cuando voy de viaje a las giras de presentación en librerías, pero luego regreso a mi casa con mis padres, mis amigos de siempre, mis estudios... Y eso es volver a la realidad, a tocar el suelo, a dejar de volar. Está muy bien y es muy necesario. Lo contrario, dejarme llevar, sería preocupante.