La presentación de la última novela del escritor Fernando Schwartz, Meneses en Skópelos, ayer en el Club Diario de Mallorca, sirvió para profundizar en la biografía del premio Planeta ya que, tal como aseguró el arquitecto y escritor Carlos García Delgado, quien le acompañó durante la exposición, «una parte de la personalidad y biografía de Schwartz está presente en la de Meneses», el diplomático protagonista de esta narración.

Schwartz definió su último trabajo como una novela que combina intriga y humor «porque difícilmente concibo una novela sin humorismo». «Quiero hacer cómplices a los lectores del cinismo de Meneses», argumentó.

Este relato es una continuación de un primer libro en el que se narraban las andanzas de Meneses, un diplomático atípico al que el gobierno acude cuando es necesario resolver un embrollo que no admite soluciones oficiales.

En esta ocasión el protagonista tiene que enfrentarse a otro caso difícil: el secuestro de tres chicas en la isla griega de Skópelos, que son hijas de la presidenta del gobierno. «La capacidad de persuasión y seducción de Meneses me recuerda a Schwartz y a los datos de su vida menos conocidos», precisó Carlos García.

A partir de ahí el novelista dio a conocer a sus antepasados más relevantes que han influido en su manera de concebir la existencia y que se dejan traslucir en su última novela: un teniente francés del ejército de Napoleón; un tío abuelo alcalde fusilado por rojo durante la Guerra Civil; el poeta León Felipe, un médico hipnotizador amigo del general Franco y el torero mexicano Carlos Arruza. A todo ello hay que sumar la faceta de diplomático de Schwartz que le ha llevado a residir en las principales ciudades del mundo.

Este relato trepidante del cosmopolita y multidisciplinar premio Planeta fue escrito durante el confinamiento y puede considerarse una mezcla de intriga, novela negra y de aventuras con una descripción minuciosa de los escenarios en sus más de trescientas páginas.

La faceta de seductor de Schwartz se traslada también a Meneses. En la novela los personajes femeninos adquieren un protagonismo especial y el propio novelista reveló los motivos: «Tengo devoción por las mujeres con carácter, fuertes, con convicciones y personalidad. Por eso siempre hay mujeres fuertes en mis novelas. Soy un antimachista». El público asistente al acto de presentación pudo conocer las historias de seducción de bellas féminas durante su etapa de cónsul en Londres y Nueva York. «Aquellas señoras cayeron en mis redes como sucede por ejemplo con Meneses y esa mujer de piernas interminables que resulta ser una asesina sanguinaria», afirmó el que fuera embajador en diferentes países y autor de una veintena de libros. De hecho, dirigió un agradecimiento especial a tres mujeres que le han ayudado en la elaboración de esta novela.

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Fernando Schwartz presenta su última novela en el Club Diario de Mallorca Manu Mielniezuk

También hubo espacio durante la exposición para reflexionar sobre si los personajes como Meneses, que se mueven en la sombra, son necesarios en los países democráticos.

Las cloacas del Estado

«Depende de la importancia que concedan a las cloacas del Estado. En nuestro país hemos tenido los GAL y otros casos que van saliendo a la luz. Hay personas expeditivas como Meneses que resuelven los problemas espinosos con dinero y chantajes», aseguró Schwartz para añadir un ejemplo: «Veo en Meneses a Miguel Ángel Rodríguez, el asesor personal de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Es un manipulador y sería capaz de cualquier cosa. Así tiene a Díaz Ayuso enfrentada con Casado».

Conectando con la actualidad, Schwartz aseguró que si fuera presidente del Gobierno mandaría al diplomático Meneses «a resolver un par de asuntos serios en Nicaragua y Venezuela. El presidente nicaragüense es un bandido absoluto». De hecho, el escritor avanzó que habrá otra novela para enviar a Meneses a Caracas «aunque primero tengo que acabar mis memorias», ironizó.