El sector audiovisual de Baleares denuncia los recortes en IB3 para la producción de contenidos televisivos. Kiko Domínguez, presidente de la Associació de Productores Audiovisuales de les Illes Balears (APAIB), explica que el presupuesto ha pasado de 10 a 7,5 millones de euros para 2021. A pesar de las reuniones mantenidas con la dirección del ente público, Domínguez confiesa que no han recibido una justificación que explique este cambio. Recuerda que el presupuesto general de IB3 sigue siendo el mismo que el año pasado, por lo que «no tiene sentido» que se reduzcan las partidas para las producciones audiovisuales.
Domínguez declara que, en Baleares son más de 1.000 familias las que dependen del sector audiovisual, por lo que esta decisión «pone en peligro» la supervivencia de las productoras y de los puestos de trabajo que generan. El presidente de la APAIB manifiesta que los trabajadores de informativos de IB3 han visto mejorada su situación salarial tras un acuerdo parlamentario, y pide que estas mejoras se apliquen a los trabajadores de las productoras.
Además, el sector critica el mal funcionamiento del Institut d’Indústries Culturals (ICIB). Explican que el mal funcionamiento genera «inseguridad económica y jurídica» y piden que se busque alguna solución.
Lluís Ortas, fundador de la Associació de Cineastes de les Illes Balears (ACIB), afirma que se está produciendo una «huida del talento balear» por culpa de la situación actual y confiesa que esperaban un cambio en el modelo económico tras la pandemia. «No tenemos la capacidad de llevar a cabo proyectos y se acaban haciendo en otros lugares como el País Vasco», declara Ortas.
Ana Olivia Fiol, directora de la Asociación de Profesionales del Audiovisual de Ibiza (APAI) hace una reivindicación de la necesidad de seguir apostando por las otras islas para la producción de programas para IB3. Fiol reclama un aumento de las contrataciones de producciones en todas las islas, no solo en Mallorca. Actualmente, en Ibiza y Formentera solo se producen el 1,19 por ciento de la programación de IB3. En Menorca, el 2,53 por ciento. Una situación que agrava aún más si cabe la situación en estos territorios.
Victoria Morell, delegada de la Asociación de mujeres cineastas y profesionales del sector audiovisual (CIMA), remarca la peligrosa precarización a la que podría conducir esta decisión. Esto afectaría de forma directa a las mujeres, que durante la pandemia vieron empeorada su situación. Añade que IB3 debería tener un plan de igualdad obligatorio y elaborar un análisis del impacto que estos recortes producen.
Por su parte, Jordi Oliva, presidente de la Federación de Productores Audiovisuales (PROA), defiende el gran nivel audiovisual de Baleares, así como la gran capacidad de coproducción, y explica que existe el riesgo de que se convierta en un sector enfocado solo a los servicios, sin creación propia: «El Govern debe entender que este es un sector estratégico».
