Primeros grafitis. Can Oleo acogió ayer un taller infantil de pinturas rupestres para enseñar a los niños que esta técnica puede ser considerada como los primeros grafitis de la prehistoria. Los pequeños aprendieron que en estas pinturas se representa la cotidianidad y todo lo que envuelve a quien lo pinta: animales, personas y figuras esquemáticas, empleando carbones y pigmentos naturales. En esta actividad, los participantes utilizaron materiales como palos, además de sus propias manos, para expresar lo que veían.