Agentes de la Policía Local de Sant Antoni (Eivissa) se incautaron de 800 kilos de material procedente de la venta ambulante tras un nuevo dispositivo programado para el controlde esta práctica en Cala Saladeta. Los agentes denunciaron a seis personas.

Según informó ayer el Ayuntamiento, el operativo tuvo lugar el pasado jueves entre las 12:30 y las 14:30 horas. Debido al volumen y peso del material intervenido fue necesario el uso de una embarcación para su transporte. Los agentes requisaron, entre otros objetos, 70 kilos de hielo, 50 latas de refrescos, 25 bocadillos, 223 empanadas, 43 pareos, 5 kilos de fruta fresca y 10 litros de licor.