El mes que viene, empezará la primera fase de unas obras de mejora en la autovía que une Palmanova y Peguera, consistentes, sobre todo, en labores de asfaltado en diferentes tramos.

Los trabajos durarán unos dos meses y se harán en horario nocturno, para entorpecer lo menos posible al tráfico.

Así lo anunciaron ayer el conseller Marc Pons y el alcalde Alfonso Rodríguez Badal, tras una reunión celebrada en el ayuntamiento de Calvià. Destacaron el paso que supone este acondicionamiento de la carretera, que presenta "importantes deficiencias desde su construcción".

En una fase posterior, que se desarrollará después del próximo verano, se acometerá la principal obra de mejora, a la altura de Costa de la Calma.

En este punto, se tendrá que levantar todo el firme y deberá reasfaltarse, lo que ocasionará cortes de circulación y la habilitación de vías alternativas, según detalló el alcalde calvianer. El conseller destacó que, una vez acabadas estas obras que irán a cargo de la constructora de la autovía, se podrá plantear ya la recepción de la infraestructura, para que pase a manos del Consell.

El Ayuntamiento resaltó también que la obra permitirá acondicionar el tramo del Passeig Calvià que aún está sin recepcionar.