Alart convirtió ayer las calles de Alaró en una gran feria nocturna de arte. La octava edición de la fiesta artística se celebró desde las ocho de la tarde hasta pasada la medianoche con un completo programa de exposiciones y actividades alternativas. 40 artistas, 18 espacios y 9 espectáculos completaron una velada que, una vez más, congregó numeroso público en las calles céntricas del pueblo.

Los asistentes pudieron visitar las muestras artísticas en las salas de arte, pero también se toparon con propuestas innovadoras en otros rincones del pueblo, como la plaza de la Torre de la electricidad, y en bares, restaurantes y casas particulares. El auge de Alart ha incrementado cada año el número de locales dispuestos a albergar una instalación, una proyección de videos o una exposición.

Incorporaciones

Este año se han incorporado al programa dos talleres de artistas, como son el de Toshie Ooue y el de Diego Nebot, que abren sus puertas al público para mostrar sus últimos trabajos.

Una de las exposiciones centrales del Alart 2014 fue la realizada por el artista Joan Sastre en el casal Son Tugores con el título ´Documents destruïts´. La muestra presenta una serie del artista elaborada en los años 2012 y 2013 en base a restos de papeles triturados.

Otro de los atractivos de la noche fue la exposición de Maíllo en el centro Addaya. El artista madrileño ha estado trabajando en el taller del centro durante las últimas semanas y aprovechó la noche Alart para presentar estas últimas pinturas.

En el teatro local se proyectó un video de Diana Larrea con sus intervenciones urbanas y performances, mientras que en la nueva Galería XF se mostró una colectiva de artistas internacionales titulada ´Summer hours´. La Fundació Lichter presentó una retrospectiva con la obra del pintor alemán Alfred Lichter en la etapa 1990-2012, cuando residía en Alaró.

Dos de las piezas más llamativas de la velada estuvieron ubicadas en los bajos del Ayuntamiento, y fueron la escultura de Fabián Schalekamp ´Construyendo nidos´ y la instalación ´Toro sentado no se ordeña´, de María Isabel Uribe. En el primer piso del edificio consistorial se presentó un año más una colectiva de artistas locales, con firmas de Diego Delgado, Andreu Llambies, Vicenç Palmer, Steve Bell, Pau Real y Eduardo Suárez del Real. Además, la ruta permitió contemplar piezas permanentes, pero que este día cobran mayor protagonismo, como la escultura de James Lambourne en el parque de Son Tugores, el mural de Menéndez Rojas en la fachada del teatro, o la obra de Pep Llambías en el interior del teatro.