Cinco de la tarde del miércoles en Alemania. En un bar del centro de Nuremberg, dos amigos ilustremente mallorquines y del PP, los alcaldes de Felanitx (Biel Tauler) y de Alaró (Joan Simonet), disfrutan de sus respectivas jarras de cerveza para no ponerse nerviosos ante la gran cumbre. "Estamos en disposición de adelantar que esta misma noche nos reunimos con Angela Merkel para hacerle una proposición que no podrá rechazar", susurra Tauler mientras de fondo suena la voz del otro alcalde, a modo de apuntador: "Le propondremos convertir la isla de Mallorca en un nuevo ´länder´ alemán. ¡No tendrá más remedio que hacernos suyos y ´abocar els doblers´ ya!". Desconocemos, por estar al otro lado del hilo telefónico, el número de cervezas consumidas por los interlocutores, aunque es evidente que no lo estaban pasando nada mal.
Las asociaciones de vecinos reniegan de Joan Ginard
El nuevo pacto de Manacor entre Antoni Pastor y los grupos afines de AIPC y ALM, no ha contentado a todos por igual. Uno de los regidores de ALM recién llegados, Joan Ginard y que ha asumido Sanidad y Participación Ciudadana, ya tiene su grupo de ´fans´. La Federación de Asociaciones de Vecinos (de la que Ginard fue presidente hace escasamente un año) ha registrado una instancia dirigida al propio Pastor para pedir que le destituya como interlocutor con el pueblo. El secretario del colectivo, Antoni Oliver, también se ha quejado de lo que él considera una "incapacidad para defender a los vecinos de la zona des Convent" por parte de la regidora de Urbanismo, Catalina Riera, a raíz de unas obras "molestas" realizadas por una conocida empresa privada.
