La polémica ORA de Colònia de Sant Jordi vuelve a estar activa desde el pasado martes, 1 de mayo. Una temporada más se prevé que funcione a pleno rendimiento hasta el 31 de octubre. Ya en esta primera semana hay quejas de ciudadanos que consideran "muy perjudicial" este servicio. El equipo de gobierno municipal, formado por PP y Convergència per les Illes, mantiene negociaciones con la empresa concesionaria, Grupo Setex, para que se puedan expedir cuanto antes tarjetas bonificadas para aquellos trabajadores afectados por las líneas azules del núcleo costero.

La regidora y exalcaldesa Maria Bonet (PP), consultada ayer por este diario, señaló que el objetivo es que aquellos trabajadores, empresarios y empleados, así como autónomos, que acrediten su condición mediante contratos laborales, puedan beneficiarse de dichos bonos para aparcar siempre y cuando su función se lleve a cabo en una de las dos zonas ORA de la localidad, estén o no empadronados en el municipio saliner.

Según la concejala Bonet, Setex ha comunicado verbalmente que está conforme con la iniciativa. Por ello, el Ayuntamiento confía que pronto puedan empezar a entregarse los bonos. Respecto a su coste, Bonet reveló que la última cifra objeto de consenso ascendía a unos 100 euros para los seis meses de funcionamiento de la ORA.

Cabe recordar que este controvertido servicio fue impulsado en la pasada legislatura. La vigencia de la ORA se estableció para los años 2010, 2011, 2012 y 2013, con una recaudación anual aproximadada a los 80.000 euros. Recientemente el Consistorio multó a Setex por falta de transparencia en sus números. La concesionaria presentó alegaciones.

La ORA está en marcha de las 10 a las 19 horas, todos los días de la semana y festivos incluidos. La tarifa mínima es de 50 céntimos por 30 minutos. La máxima, cinco euros por un día. La anulación de la denuncia, por primer exceso de tiempo, cuesta tres euros.