Parece que no. Parece que hay dificultades para encontrar gente que vea perspectivas de negocio en eso de conjugar las cañas, los bocatas y las patatillas con el ejercicio físico. Algo llamativo, sin duda. Desde hace ya bastante tiempo, el pabellón ´pionero´ del municipio, el de Calvià vila, no cuenta con servicio de bar. Y sucede lo mismo con los equipamentos deportivos (campos de fútbol y rugby) de Son Caliu. En este caso, los vecinos han llegado a recoger más de 300 firmas para que se licite la explotación de un bar. Un concurso que ya en 2008 quedó desierto. Tal vez en Calvià a aquella frase de ´mens sana in corpore sano´ habría que añadir ´... y libre de cañas, bocatas y patatillas´.