Son las 8.55 de una mañana fría y puedo observar que dos coches aparcan en las inmediaciones de un colegio, en cada uno de ellos un adulto fumando; el primero es la mamá la que fuma y además hay un bebé de pocos meses y un niño de 8 años de 3º de Primaria en el interior del vehículo. En el otro, un papá exhalando sus humos en el pequeño cubículo de su coche donde dos hermanos uno de 7 y otra niña de 5 asmática, comparten asiento trasero; sin embargo, ninguno de ellos les priva del nocivo humo de su cigarrillo. La pregunta es: ¿creen ustedes que estos padres desconocen la nocividad del humo de su preciado cigarrillo concentrado en el poco espacio de su coche, o por el contrario creen que no les pasa nada a sus hijos por ello?

Las diferentes respuestas a esta pregunta conducen al titular de este escrito: ante una respuesta positiva, es decir de desconocimiento, se hace patente reforzar la educación a los padres en temas de salud pública que afectan a menores, a esos menores más preciados que son sus hijos. Si la respuesta es negativa, o sea, que saben de lo perjudicial del humo para la salud, entonces deberíamos plantearnos la norma que ya planteó en su día el País Vasco para que en caso de incumplimiento, exista una sanción a conductores que fumen en el coche en presencia de menores de edad, quizás con un rigor inversamente proporcional a la edad del menor, o sea, en presencia de niños muy pequeños, multas mayores y viceversa. Y es que el niño no puede elegir a los padres que le ha tocado y, al no haber clases obligatorias para padres en temas sociales, de salud y, sobretodo de sentido común, se deberían arbitrar situaciones como esta.

¿Se puede conseguir que la educación sea suficiente sin que exista la norma y la posterior sanción? La misma pregunta podría trasladarse al terreno deportivo de la competición: ¿Podría existir un partido de baloncesto sin árbitro?... Se intentó en un campeonato de España de 3x3 de baloncesto (Sevilla, mayo de 2001) donde los equipos tenían que aplicar las normas del baloncesto sin árbitro; resultado: padres y madres en las semifinales de minibasket masculino (niños de 11 y 12 años) cogiendo del brazo al niño rival para que no sacase de banda€ ¡Vaya espectáculo para la formación de los niños! Hablé del tema con el exseleccionador nacional Lolo Sinz y efectivamente cuando un equipo tiene algo importante que ganar, la figura mediadora del árbitro se hace imprescindible. Como respuesta a la primera cuestión, lo que hace una mayor y mejor educación es disminuir el número de sanciones, pero no que desaparezcan.

La ley del tabaco de 30 de diciembre de 2010 establece las condiciones que deben tener las terrazas de bares y restaurantes para permitir que se fume en ellas, sin embargo los inspectores que sanidad ha dispuesto para que se cumpla la norma (no utilizar más de dos muros o paramentos; con tres, que son la mayoría de terrazas, se incumple) no parecen "conocerla" y ello contribuirá en breve a un alud de denuncias a juzgar por la gran cantidad de ciudadanos que nos llaman.

Igualmente ocurre con los llamados "clubs de fumadores"€ en ellos está prohibida la entrada a menores y también el consumo de bebidas y comidas; no deben haber entradas comunicadas y deben tener una ubicación con licencia de actividad propia y diferente de cualquier restaurante o bar adosado€ y eso se incumple taxativamente con "el visto bueno" de los inspectores de sanidad€ eso no nos permite otra cosa que dar la opción a los ciudadanos de denunciar, para los que incumplen la norma reciban por parte de los inspectores (si es que éstos no les han llamado antes de darse cita allí) la correspondiente sanción.

Aunque es cierto que en el interior de bares y restaurantes se cumple muy bien la ley, en las entradas principales y aceras circundantes de hospitales, parques infantiles y centros educativos, ésta brilla por su ausencia sin que nadie vele por su cumplimiento. Nos encontramos que casi el 98% de los centros educativos de Balears carecen de señalización de prohibición de fumar en la entrada principal y alrededores; en este caso deberían ser los directores/as de los centros educativos, los alcaldes de los ayuntamientos y los gerentes de los hospitales los responsables de hacer cumplir esa normativa, con la inestimable pero hoy ausente supervisión de su correspondiente conselleria y/o Ayuntamiento.

Finalmente, quedan otros aspectos de la ley por desarrollar y que afectan a un número importante de ciudadanos de las Balears que nos piden empezar a difundir informaciones relacionadas con normativas de no fumar en estadios de futbol y recintos deportivos al aire libre donde practican deporte menores (prácticamente todos los campos de futbol de Balears) sin olvidar que en muchos estadios europeos incluyendo el Camp Nou y San Mamés ya no está permitido fumar. Tampoco es agradable para padres de niños pequeños el hecho de que éstos se lleven a la boca las colillas dejadas en la arena de las playas por los fumadores, y es que hay muchas playas en Canarias donde los ayuntamientos ya han prohibido fumar€ en Balears nuestras preciosas playas se convierten a menudo en estercoleros de colillas, lo que da una imagen deplorable que poco contribuye a trasladar nuestra oferta de ocio y descanso al resto de ciudadanos del mundo. Esperemos un cambio de actitud que invite a promover entre los alcaldes de nuestros ayuntamientos, iniciativas como las de las islas Canarias, Barcelona y Bilbao.