El pleno del Parlament rechazó ayer la elección de Jaume Far como director de la Oficina de Prevención y Lucha contra la Corrupción al no obtener el respaldo de una mayoría cualificada de los diputados. Far era el elegido por los partidos del Pacto para ocupar este cargo, aunque PP, El Pi y Ciudadanos ya habían anunciado que no lo apoyarían al no haberse consensuado previamente con ellos. El voto fue secreto y de los 57 diputados que depositaron la papeleta en la urna (estaban ausentes del pleno la popular Antònia Perelló y Antoni Reus, de Més per Mallorca), 31 lo hicieron a favor de Far, mientras que 24 papeletas fueron en blanco y dos, nulas. La falta de apoyo del PP y El Pi dejaba ya de antemano claro que no habría el suficiente respaldo para que la propuesta de Far como director de la Oficina Anticorrupción saliera adelante en esta primera votación. Sí lo será, previsiblemente, en un próximo pleno, que en principio coincidirá con el de la aprobación definitiva de los presupuestos del Govern para 2018, a partir del 19 de diciembre, ya que en una segunda votación no será necesaria la mayoría cualificada de tres quintas parte de los votos del pleno y será suficiente con la mayoría absoluta que suman PSIB, Podemos, Més per Mallorca, Més per Menorca y la diputada de Gent per Formentera, Silvia Tur. Far es inspector de Hacienda y en la actualidad dirige la oficina tributaria de Calvià.
