El portavoz del PP en el Consell de Mallorca, Mauricio Rovira, advirtió ayer de que la creación de una empresa pública para gestionar el servicio de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es "la peor solución" de las tres posibles. Rovira criticó ayer al gobierno del Consell por imponer de "forma unilateral" esta decisión, a pesar de que se comprometió a negociar y pactar el futuro de la ITV con los partidos de la oposición, PP y Cs.

"Ni se ha pactado ni se ha consensuado" esta decisión del Consell, aseguró Rovira antes de lamentar el, a su juicio, "paripé" escenificado y preguntarse para qué quiere el Consell crear ahora una comisión mixta de técnicos y partidos que estudien y decidan el futuro de la ITV.

Rovira dejó claro que su grupo también está por el fin de la actual concesión, que finaliza dentro de un año, y que hay tres posibles salidas para continuar prestando el servicio: una liberalización absoluta, una concesión privada y crear la empresa pública.

Ésta última, mantuvo, es "la peor y las más cara" y la que sin duda supondrá una menor disminución del actual precio que pagan los usuarios de este servicio, que es una de las razones principales para recuperar la actual concesión.

Con la creación de la empresa pública "se engordará el Consell de Mallorca" y, al final, la institución terminará asumiendo compromisos laborales con los 114 trabajadores de la ITV, adelantó.

Por estos motivos, el PP registrará una moción en el próximo pleno del Consell en contra de la creación de una nueva empresa pública e instando a que se mantenga el actual sistema, sacando a concurso una nueva concesión administrativa que incluya una mejora de las inversiones necesarias para el servicio y una bajada de las tarifas.