Si vive usted en alguno de los municipios del mapa que ilustra esta información posiblemente habrá notado cómo en las últimas semanas su televisión se ve mal, como si estuviera rota. Los canales se ven pixelados, la señal se interrumpe e incluso el sonido que nos llega a través de las ondas hertzianas parece más el de un akelarre de brujas que el de un programa televisivo.
Pero no se preocupe. Su televisión está bien. Y su antena, también. La culpa es del móvil, o más concretamente de los nodos de telefonía de cuarta generación que se han puesto en marcha recientemente en gran parte de la isla. Y la solución a sus problemas televisivos es simple y gratuita.
Cuando en 2011 se empezaba a hablar de la red de telefonía de cuarta generación -más conocida como 4G o LTE- se sabía que el servicio no iba a ser como en realidad debería. Seguro que recuerda aquella época en la que teníamos que ir andando por la casa buscando ese sitio con buena cobertura. "Prueba en la cocina, que suele haber cobertura" era una de las frases favoritas en los hogares isleños.
El problema no era otro que espectro de radiofrecuencias español. En realidad es el mismo que en cualquier otro país del mundo, pero el nuestro estaba patas arriba, algo muy propio de esta tierra nuestra. La banda de 800 MHz., la que mejor transmite la señal 4G y en la que debería trabajar esa nueva tecnología móvil, estaba en ese momento ocupada por la Televisión Digital Terrestre -TDT-. Había que tomar medidas.
Dichas medidas llegaron a través de lo que se conoció como "el reparto del dividendo digital". En 2014 habría que resintonizar todos los canales de televisión de forma que la banda de los 800 MHz. quedara libre para la irrupción definitiva de la telefonía 4G. Mientras tanto, los operadores tuvieron que buscarse la vida para poner en marcha una red 4G que no iba a ser todo lo buena que debería, utilizando el espctro de la red 3G para dar también el servicio 4G. Era como si en una autopista de dos carriles todos los coches circularan por el mismo, mientras que el segundo quedaba vacío. El atasco se iba a producir tarde o temprano.
En 2013 Vodafone, Orange, Movistar y Yoigo pusieron en marcha sus redes de telefonía 4G a la espera de poder hacerlo de forma eficaz y 100% operativa en el momento en el que se quedara libre el espectro de los 800 MHz. Y ese día ya ha llegado
El móvil mató a la estrella de la TV
La tan ansiada telefonía 4G llegó con más problemas que virtudes. Las prometidas velocidades de infarto no se conseguían más allá de algunas privilegiadas capitales de provincia, y al entrar en cualquier casa, la señal desaparecía como por arte de magia. O más bien por arte de antenas. Y ahora que por fin tenemos buena cobertura 4G, la televisión ha empezado a verse mal.
Si bien es cierto que más de uno estará pensando que "para lo que hay que ver...", la cosa no es tan grave, la desagradable sensación que provoca ver un programa de televisión que se pixela, que se oye mal o que directamente se torna en negro, molesta mucho.
La causa está en los nuevos nodos de telefonía 4G que están emitiendo en la mencionada banda radioeléctrica. Según Daniel Espín, portavoz del consorcio 'Llega800', estos nodos consiguen "mayor velocidad, mayor extensión geográfica y mayor cobertura de la señal tanto en exteriores como en interiores". Y más interferencias. Da la sensación de que estamos desvistiendo un santo para vestir a otro: mejoramos la señal del móvil y empeoramos la de la televisión. Afortunadamente, todo tiene solución.
"Las interferencias en la TDT son fácilmente subsanables. Nuestro consorcio, creado por los operadores Movistar, Orange y Vodafone, disponen de toda una red de técnicos que se encargan de solucionar estos problemas de señal colocando un filtro de manera totalmente gratuita. Y una vez colocado, se acabó con el problema" afirma Daniel Espín.
Simple, sencillo y limpio para el usuario. El ministerio de Industria, Energía y Turismo está controlando a través de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones que el despliegue de la telefonía 4G en la banda de 800 MHz. no suponga un gran problema para los usuarios, y por ahora no lo está siendo. Y es que la telefonía 4G es una buena noticia. Pero no se confíe, que el 5G está a la vuelta de la esquina.
