Balears cerró el pasado año con 36.124 empresas registradas ante la Seguridad Social y consigue por primera vez desde que comenzó la crisis mejorar sus cifras en la entrada de la temporada baja, con 1.044 centros de trabajo por encima de la cifra de diciembre de 2013, o lo que es lo mismo, un aumento de casi un 3%. Un dato a tener en cuenta: el invierno se ha iniciado con la mejor campaña navideña en muchos años para sectores como la restauración, y en estos momentos se están ejecutando un importante volumen de reformas hoteleras que están dando pie a mejoras en la actividad de la construcción y la industria.
La importancia del dato de diciembre, con esas 36.124 empresas afiliadas, radica en que aunque en 2013 el tejido empresarial ya mostró incrementos, éstos se desvanecieron durante el último mes de ese ejercicio, un hecho que se vinculó al agravamiento de la estacionalidad de la economía isleña, con apreciables caídas interanuales de la actividad al entrar en la temporada baja.
Este año no se ha dado este descenso, y además los crecimientos aparecen en todos los grandes sectores económicos. Así, los servicios pasan de las 28.002 empresas de diciembre de 2013 a las 28.742 del cierre de 2014, lo que supone un aumento del 2,6%.
En el caso de la construcción, se ha crecido desde las 4.415 a las 4.631 altas a lo largo de ese periodo de 12 meses, lo que equivale a un repunte del 4,9%, aun más intenso que el del sector anterior. En este sentido, hay que recordar que la construcción ha sido también la rama de actividad más duramente golpeada durante la crisis, lo que implica que su mejoría nace desde unos niveles de actividad mínimos. Y esa debilidad se mantiene en capítulos como el de la edificación de nuevas viviendas, que sigue en tasas mínimas, aunque existe una mayor vitalidad en la inversión destinada a reformas hoteleras o en la obra pública.
Ese impulso constructor ha beneficiado a la industria -existe una apreciable dependencia hacia el sector del ladrillo por parte de muchas firmas industriales del archipiélago-, que ha pasado de las 2.533 empresas con que cerró 2013 a las 2.610 del mes pasado, con un incremento del 3%.
La agricultura y la pesca también muestran una evolución positiva, aunque su peso en este apartado es muy bajo. En concreto, pasa de las 129 a las 140 altas, con un alza del 8,5%.
La excepción del comercio
Dentro de los servicios, sus principales subsectores también muestran un buen comportamiento con una importante excepción. El comercio no logra despegar una vez se ha cerrado la temporada turística y muestra un ligero descenso, al bajar desde las 5.537 empresas de finales de 2013 a las 5.528 del pasado mes de diciembre. El recorte es mínimo, pero muestra las dificultades que sigue presentando esta actividad cuando pasa a depender del consumo de los residentes en las islas. Hay que tener en cuenta los problemas que han vivido los establecimientos especializados en el textil durante los últimos meses de 2014 debido a que las temperaturas no registraron descensos importantes hasta que el ejercicio estaba ya a punto de concluir, frente a la buena marcha de otras firmas, como las de alimentación.
Mucho mejor es el balance que hace la restauración, que crece desde las 4.324 empresas de finales de 2013 hasta las 4.483 del cierre del pasado año, lo que supone un aumento del 3,6%. Pero no hay que olvidar que desde la patronal que agrupa a este colectivo se ha venido advirtiendo de que esta aparente fortaleza es en realidad una debilidad de esta actividad, con la apertura de nuevos negocios como refugio de personas que han perdido su empleo. Muchos de estos nuevos establecimientos no logran sobrevivir más que unos pocos meses.
La actividad hotelera también muestra una evolución positiva, y pasa de las 1.180 a las 1.217 altas en la Seguridad Social. Este dato es relevante debido a que la mejoría se produce en plena temporada baja.
También crece la rama del transporte y almacenamiento, que va desde las 1.111 a las 1.152 empresas a lo largo de ese periodo de doce meses.
