Diversas entidades favorables al Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL) y el sindicato ANPE rechazaron ayer la huelga en educación convocada por la Assemblea de Docents para el próximo día 15 de septiembre. El colectivo de profesores integrados en la plataforma ´PLIS. Educación, por favor´ acusaron a los docentes de impulsar una huelga "por razones políticas". La asociación No Vaig de Vaga criticó el "castigo para los padres y alumnos por esta nueva jornada de huelga". Asimismo, otras entidades como el Instituto de Política Familiar se mostraron contrarias al paro educativo.

El sindicato ANPE, que el pasado curso apoyó sin fisuras al resto de colectivos sindicales en la huelga, en esta ocasión ha decidido desmarcarse. Pese a ello, califica a la gestión educativa del Govern con un "suspenso". Desde ANPE apuntan que "los alumnos no pueden perder más horas lectivas y tampoco podemos pedir a los docentes más esfuerzos económicos". El sindicato aseguró que continuará con las acciones de protesta y movilizaciones y "buscaremos nuevas acciones de lucha para defender la enseñanza pública".

PLIS, después de criticar la huelga política, salió en defensa del castellano: "Solo pretenden prolongar la inmersión lingüística e impedir que el castellano se convierta también en lengua vehicular de la enseñanza", apuntaron desde este colectivo.

Por su parte, los padres de No Vaig de Vaga anunciaron denuncias "sin vacilación" para no permitir "ni la más mínima agresión hacia nuestros niños" y animaron a todas las familias a llevar a sus hijos al colegio.

El secretario general del PP, Miquel Vidal, apeló a la "responsabilidad" de los convocantes para impedir la jornada de paro del sector educativo.

Desde CCOO apuntaron que la huelga hace un año que está convocada y los trabajadores docentes han decidido reanudarla. Toni Baos, secretario general de Educación de este sindicato, indicó que "solo el Govern puede parar la huelga dando respuesta a las demandas docentes".